María José Monge curaduria.arte.mbccr@gmail.com
Alberto Durero se descubre a América, donde nunca estuvo, gracias a una exposición itinerante conformada por la Colección Dal Bosco, un admirable repositorio de grabados europeos. La muestra ofrece 70 grabados originales del genio renacentist alemán.
Los Museos del Banco Central brindan una exhibición panorámica de la obra gráfica de Albrecht Dürer (1471-1528), uno de los artistas más importantes del Renacimiento por sus aportes a la teoría y la práctica de las artes.
Durero fue también un pensador humanista, un estudioso de la proporción, un ilustrador de la naturaleza y, sobre todo, un maestro del grabado. Las técnicas empleadas por Durero fueron la xilografía, el buril, la punta seca y el aguafuerte.
La exhibición Durero, genio del Renacimiento comprende obras de diversas etapas de su vida: desde sus primeras exploraciones con el grabado hasta trabajos que dan cuenta de su madurez artística.
Las obras exhibidas muestran distintas facetas de Durero: algunas son de carácter comercial, pero otras evidencian sus inquietudes más personales, como dos de sus obras maestras: El caballero, la muerte y el diablo (1513) y Melancolía I (1514).
Con el propósito de fortalecer su programa de exhibiciones internacionales y continuar ofreciendo contenidos de alta relevancia al público, los Museos ofrecen una oportunidad única para conocer a este artista, así como una aproximación al Renacimiento, cuando se funda gran parte de la cultura Occidental.
La curadora de la exhibición, Rosa Perales Piqueres, respondió preguntas formuladas por María José Monge, curadora de los Museos del Banco Central. Perales Piqueres es doctora en historia del arte por la Universidad de Sevilla; es ensayista atenta al arte moderno, especialmente a la pintura y la gráfica. Rosa Perales ha publicado seis libros y es la directora artística de la Bienal Iberoamericana de Obra Gráfica.
–Considerando que en la obra de Durero convergen elementos de la Edad Media y del humanismo renacentista, se ha discutido sobre su lugar en la historia del arte. ¿Cómo se relaciona su obra con su época?
–Durero vive en un entorno cultural de excepción, entre un mundo medieval que muere y el cambio de mentalidad hacia el humanismo y la reforma protestante. Su padre es un artista orfebre y también un pintor muy bien considerado socialmente, y su círculo es el de los artistas de la ciudad de Núremberg.
”Durero se crio en este ambiente culto: eran los ehrbar , considerados la élite intelectual. Gracias a ello, Durero conocerá a la familia de los Pirckheimer, sus futuros mecenas y protectores, quienes lo introducen en el ámbito humanista”.
–Durero fue un promotor de la idea del artista como creador. ¿En qué consiste esta idea?
–Durero creía que el artista debía superar la barrera de artesano y elevarse a la categoría de pensador y creador del arte; por esto, con el tiempo se convertiría en un teórico del arte, como Alberti, Piero della Francesca y Da Vinci. Lo fue hasta el punto que incluso las obras en grabado que realice para el emperador Maximiliano de Habsburgo, serán de su propiedad y tendrá derecho de reimprimirlas.
–¿Cuál era el rol del grabado en la época de Durero?
–Desde la mitad del siglo XV, el uso de la prensa sustituye a la estampación a mano y permite la ejecución de grabados al mismo tiempo que la ilustración del libro. Todo esto convierte este oficio en una verdadera nueva profesión.
–¿Inciden las obras de Durero en el desarrollo del grabado posterior?
–Durero es el creador del grabado moderno, técnica de enormes posibilidades de ejecución a partir de una plancha, y medio para transmitir las ideas humanistas de geometría, composición, paisaje y perspectiva aprendidas por Durero durante sus viajes a Flandes y sus estancias en Italia, sobre todo en Venecia.
–¿Se diferencia su obra gráfica de su obra pictórica?
–Su técnica gráfica está ligada a la pictórica en el tratamiento de las formas y en la iconografía que representa. De allí proviene la inspiración poética de ambientación en sus composiciones, la geometría, el estudio de la cultura antigua: todo ello se ha denominado “peso metafísico”.
–¿Qué significó la utilización de las letras 'AD' en la producción artística de Durero?
–La clave de su éxito está en la publicación de la ilustración El Apocalipsis , en 1498, con el monograma AD: fue un éxito internacional. Ya no le preocupó la complacencia de los clientes. Durero trabajó libremente e intuyó que a través de la imagen multiplicada podría educar el gusto de los compradores, que podrían ser de todas las clases sociales.
–¿En qué reside la importancia de ‘El caballero, la muerte y el diablo’ y ‘ Melancolía I’ ?
– Todos conocemos el grabado de la Melancolía I por ser una de las obras claves del maestro. Aunque son numerosas sus interpretaciones, la más próxima se refiere a la representación del cansancio del pensador, del investigador humanista, del artista que busca la perfección. El caballero, la muerte y el diablo nos remite a una reflexión procedente del mundo medieval sobre la fragilidad de la vida.
–Los temas de carácter religioso desempeñan un papel fundamental en el trabajo de Durero; en forma específica, los relacionados con la vida de Cristo cautivaron su atención hasta tal grado que se le atribuyen seis versiones de la Pasión de Cristo...
–El aspecto religioso de su obra grabada es muy importante pues vivió en una época convulsa. Su pensamiento al respecto sufrió una gran evolución debido a la influencia de las ideas reformistas, como se advierte en sus últimas estampas religiosas, de una gran austeridad y profundidad. Durero era consciente de la importancia del grabado para instruir y educar al pueblo, no solo para transmitir los dogmas religiosos y políticos.
–Otra faceta de su trabajo se relaciona con su vínculo con la corte de Maximiliano I, como es el caso del 'Gran carro triunfal'. ¿Puede referirse a esta obra?
–El emperador Maximiliano fue el gran mecenas de Durero, pintor de su corte desde 1512. Maximiliano era consciente de la importancia de la imagen y del mensaje artístico como difusor de las ideas y para construir una imagen heroica del poder.
”Maximiliano buscaba la representación plástica adecuada al poder político: de allí sus numerosos encargos al artista hasta la muerte del emperador, en 1519. La obra más significativa es el Gran carro triunfal, que aunó la tradición clásica con el nuevo sistema de poder: la monarquía autoritaria. Su máximo exponente fue el nieto de Maximiliano, Carlos V, para quien también trabajará Durero”.
–Durero se ha singularizado por su trabajo teórico y específicamente por su interés en las proporciones de la figura humana. ¿Cuáles son sus aportes en estos campos?
–Como teórico, una faceta importante de Durero fue la necesidad de transmitir sus logros, a través de escritos y publicaciones que difundieran el nuevo arte en el norte de Europa.
”Sus tres tratados de arte, ilustrados con xilografías, demuestran sus conocimientos de los principios geométricos y arquitectónicos, y aportan magníficos estudios de las proporciones del cuerpo humano.
”El Tratado de las proporciones son cuatro libros sobre la proporción humana; el último se publicó en 1528, tras su muerte”.
–¿Qué elementos de carácter formal o simbólico podría recomendar al visitante que observe las obras?
–Los temas, los elementos secundarios o anecdóticos, el paisaje en la obra, la técnica y los contrastes de luces y sombras.