El duelo de la final entre Saprissa y Herediano también se juega fuera de la cancha y en especial entre las dirigencias. A los reclamos de un lado y del otro se sumó un encontronazo entre Aquil Alí, dirigente florense, y Gustavo Chinchilla, gerente general morado.
En la cuenta regresiva para el inicio del partido de vuelta en la Cueva, Chinchilla brindaba declaraciones a los medios de comunicación con derechos de transmisión. Sin embargo, Alí lo abordó en media entrevista y le realizó un fuerte reclamo.
¿Qué pasó? En este partido se está implementando una directriz que se vio en el congresillo técnico y es que ningún dirigente del Team podía ingresar a la cancha. Ellos solamente tenían derecho a ir al sector destinado para el equipo visitante.
“Nosotros siempre hemos dejado las puertas abiertas para que cualquier directivo de Saprissa y esa gente pueda entrar a los estadios nuestros, en cualquier parte”, expresó Aquil en Columbia.
Ante ese reproche, el gerente tibaseño explicó que esto es algo que vienen hablando con la Unafut, porque el reglamento de Competición claramente identifica quiénes son los personeros que pueden entrar al campo de juego y quiénes no.
“Nosotros estamos siguiendo el reglamento de Competición”, dijo Chinchilla.
Eso molestó más a Alí, insistiendo en que en partidos de Concacaf puede entrar a todos los sectores. Chinchilla recalcó en que los reglamentos se hacen para cumplirlos y el dirigente de Fuerza Herediana alegó que en el fútbol nacional eso nunca antes se había visto.
El gerente replicó que el problema es ese, que antes no se había cumplido. Aquil le prometió que a partir de ahora sí los cumplirían.
“Si la Concacaf es superior que el ente nuestro y nos dejan entrar, por qué usted entra en esta enemistad desde ahora”, le dijo.
A eso, Gustavo Chinchilla respondió que no es enemistad y que tampoco es personal.
“Por supuesto que es personal. ¿Por qué Concacaf nos deja entrar?”, cuestionó el rojiamarillo y agregó: “Eso yo siento que es mala leche de parte de ustedes”, contestó el dirigente herediano.
Eso no le gustó a Chinchilla: “¿Entonces está diciendo que cumplir los reglamentos es mala leche?”.
La discusión entre ellos se prolongó algunos minutos y al parecer, esta directriz se tomó en el congresillo de seguridad, al que no asistió Herediano.
Con esto, los florenses quedaron muy molestos. Jafet Soto primero llegó a apartar a Aquil Alí, porque ya era suficiente. Y todo estaba siendo en vivo, en los puros micrófonos de las radios en vivo.
Pero después, el propio presidente del Team dijo que a partir del otro torneo él también tomaría las mismas medidas.
Robert Garbanzo afirmó que esta directriz “es una payasada” y que “no hay respeto para el equipo rival”.