Educar en pluralismo y luchar fervientemente por la creación de oportunidades, como mecanismo para erradicar la pobreza, puede sonar a utopía platónica, pero es la única forma de establecer sociedades de convivencia pacífica.
Educar en pluralismo y luchar fervientemente por la creación de oportunidades, como mecanismo para erradicar la pobreza, puede sonar a utopía platónica, pero es la única forma de establecer sociedades de convivencia pacífica.