Desafío de brigadas puso a prueba capacidad de respuesta de 600 voluntarios

Correr en busca de un extintor, extraer a los pacientes en forma segura, apagar el fuego, acoplar las mangueras y suministrar el agua correctamente. Una emergencia supone muchos detalles y poco tiempo para reaccionar; en suma, se requiere una gran capacidad de respuesta.

Esa habilidad de responder a tiempo y eficazmente ante un suceso fue puesta a prueba este sábado 16 de marzo en el III Desafío de Brigadas, realizado en la Academia Nacional de Bomberos, en San Antonio de Desamparados, San José.

En la actividad, organizada por el Instituto Nacional de Seguros (INS), participaron 600 personas. Ellas son integrantes de 55 brigadas provenientes de 43 instituciones y empresas con operaciones en Costa Rica. Algunas de las entidades fueron representadas por más de un equipo.

Desafiando retos como apagar el fuego en un siniestro simulado, deslizarse rápidamente y en forma segura por tuberías o sitios estrechos, y trasladar a personas heridas, los participantes midieron las fortalezas y debilidades de sus prácticas.

Su objetivo es saber cómo reaccionar ante un evento real y aprender a manejar correctamente las situaciones de riesgo en sus lugares de trabajo, no solo para resguardar a sus compañeros, sino también para cuidar a sus clientes.

Entre las entidades participantes destacaron el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), el Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (Icoder), el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), el Instituto sobre Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA) y Radiográfica Costarricense S. A. (Racsa).

Desde el sector empresarial, algunas de las firmas que dijeron presente fueron Alimentos Prosalud, Café Britt Costa Rica, Metalco, Autostar y Ulacit.

Para sumarse al III Desafío de Brigadas, los equipos entrenaron desde octubre del 2018, cuando fue anunciada la actividad.