Cinco sectores productivos serán prioritarios dentro de la migración hacia modelos de producción “más verdes”, por medio una gestión eficiente de residuos y menor consumo de los recursos naturales. Así lo establece uno de los pilares de la Estrategia Nacional de Economía Circular, presentada este martes 27 de junio por autoridades de Gobierno y organizaciones privadas.
El plan fue desarrollado con la participación de los ministerios de Ambiente y Energía, de Salud, de Economía, Industria y Comercio (MEIC), y el de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones, así como por los representantes del sector privado, como la Cámara de Comercio de Costa Rica y la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep), entre otros.
Jaime Cerdas, fiscal de Uccaep, explicó que la estrategia de economía circular gira sobre cinco sectores prioritarios, que son los de construcción e infraestructura, comercio y servicios, agropecuario y ganadería, así como la manufactura, y el turismo.
“Hay varios factores por los que se escogieron estos sectores, pero los más importantes son la preponderancia que tienen ellos en el PIB (producto interno bruto), el potencial que tienen en la generación de gases de efecto invernadero, y la generación de empleo”, manifestó Cerdas.
El concepto de economía circular tiene como propósito separar las actividades económicas del consumo excesivo de recursos naturales y eliminar la generación de residuos y contaminantes del sistema productivo desde la etapa de diseño de bienes y servicios, por medio de una transición hacia fuentes renovables y un mejor aprovechamiento de los residuos que se generan en la cadena de valor.
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Según la estrategia presentada, se pretende generar impacto en esos sectores por medio del desarrollo de nuevos negocios enfocados en modelos de consumo responsables, en la generación de valor agregado y atracción de inversiones, y un turismo más sostenible, así como en un uso más eficiente de recursos naturales y el reaprovechamiento de residuos en actividades de construcción.
La estrategia de economía circular invita a todos los sectores de la sociedad a involucrarse, pues a pesar de que existen cinco actividades económicas priorizadas, se pretende incorporar a otras industrias productivas dentro de la iniciativa, que empezó a confeccionarse en mayo pasado y se dividió en seis etapas.
Como parte de la estrategia, se integraron ocho principios importantes dentro del plan, entre ellos la eliminación de residuos y la contaminación desde el diseño de bienes y servicios; extender la vida útil de los productos, una transición hacia la economía circular justa e inclusiva, la cooperación multisectorial, entre otros.
Metas
La estrategia presentada este martes pretende convertir a Costa Rica en un país líder en economía circular, innovación y sostenibilidad para Latinoamérica, por medio de un modelo de desarrollo económico sostenible y circular, para el año 2050.
En el corto plazo (2025), la estrategia pone como meta la reducción de impactos socioambientales, como residuos, gases de efecto invernadero, o la extracción de recursos naturales, la formalización de empleos relacionados con el reciclaje y el reaprovechamiento de materiales y creación de centros de innovación.
Para el 2030, el plan tiene como objetivo el cumplimiento de metas relacionadas con la descarbonización de la Agenda 2030, una transición energética de segmentos como el transporte o en procesos dependientes del uso de combustibles fósiles, la descentralización de la gestión pública por medio de la digitalización y procesos de urbanización basados en planificación territorial sustentable.
Lilliana Rodríguez, coordinadora de la Comisión de Vicerrectores de Investigación del Consejo Nacional de Rectores (Conare), explicó que para alcanzar con éxito ese propósito plantearon una serie de mecanismos habilitadores para la implementación de la estrategia.
Entre ellos el financiamiento, como el desarrollo de líneas de crédito y financiamiento verde, una gestión pública más competitiva, así como la educación en todos los niveles (desde básica hasta superior (para lograr una transición hacia la economía circular para formar personas para empleos del futuro e incentivar trabajos más verdes.
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En tanto, Olga Segura, coordinadora de Planificación en Gestión Integral de Residuos y Economía Circular del Ministerio de Salud, explicó que incluyeron cinco ejes estratégicos para conseguir las metas planeadas en el marco del plan presentado este martes.
Por ejemplo, la inclusión de principios y criterios de evaluación en instrumentos y distintivos, tales como acreditaciones o certificaciones, la adopción de patrones de producción y consumo sostenible (inicialmente en sectores priorizados, pero no excluyente a otras industrias) y la planeación de un modelo de desarrollo territorial circular, donde las municipalidades toman un papel preponderante.
También incluyeron la necesidad de una consolidación de una red de centros de innovación circular en todas las regiones del país, así como un eje enfocado a impulsar la adopción de una economía circular a lo largo de toda la industria de la construcción e infraestructura, desde la extracción de materias hasta la demolición de los inmuebles cuando cumplan su vida útil.
Cynthia Córdoba, coordinadora de Economía Ambiental del Minae, manifestó que actualmente cuentan con 47 indicadores dentro de la estrategia para medir los resultados del plan interinstitucional y añadió que generarán más métricas sobre la marcha.