Por primera vez en décadas, el icónico letrero de Hollywood, al menos una parte, se iluminó para celebrar el centenario de la “meca del cine”.

Con las nueve letras, el letrero es oficialmente centenario. Pero, como ocurre con muchas grandes damas envejecidas del sétimo arte en Hollywood, luce tan fresco como siempre.

Al igual que los actores y actrices a los que observa desde las alturas, el letrero ha aparecido en una buena cantidad de películas y hechos destacados del cine.

Los directores que quieren que su audiencia sepa que una película está ambientada en Los Ángeles tienen una toma fácil de fijar, mientras que un cineasta que quiere representar la destrucción de Estados Unidos puede dejar que su equipo de efectos especiales aplique su imaginación sobre el cartel.

También ha sido testigo de una tragedia de la vida real: la actriz británica Peg Entwistle se quitó la vida lanzándose desde lo alto de la letra H en 1932.

De Hollywoodland a Hollywood

El letrero es una visita obligada para cualquier cinéfilo o turista que visite Los Ángeles. Inicialmente, decía Hollywoodland y fue construido en 1923 como un anuncio de desarrollo inmobiliario de lujo.

Durante su primera década estuvo iluminado de forma rutinaria con miles de bombillas, con Holly, Wood y Land encendidos como un faro de las deseables casas que se ofrecían alrededor.

En la década de 1940, las letras parecían un poco desgastadas. El diario Los Angeles Times informó que vándalos o tormentas de viento habían dañado la letra H, antes de que los lugareños decidieran que ya habían tenido suficiente y pidieran al gobierno de la ciudad que lo derribaran.

La Cámara de Comercio de Hollywood, reconociendo que tenía una marca exitosa en sus manos, intervino y se ofreció a reparar el letrero.

Aun así, las últimas cuatro letras tuvieron que desaparecer: el letrero debía representar a toda la ciudad, no solo una parcela territorial de moda. Para 1949, el cartel recién restaurado simplemente decía Hollywood.

Amables donantes

Pasaron tres décadas de sol abrasador y tormentas ocasionales que pasaron factura a las famosas letras, fabricadas en madera y con una altura de 15 metros.

Finalmente, la primera O del cartel se redujo a una “U” minúscula y la segunda O se derrumbó por completo.

Es entonces que aparece el cantante Alice Cooper, el molesto padre del denominado shock rock, que lideró una campaña para restaurar el cartel y ponerlo como en su antigua gloria. Así, acabó donando $28.000.

Otras ocho personalidades del espectáculo, incluidos el actor Gene Autry, el fundador de la revista adulta Playboy, Hugh Hefner y el cantante Andy Williams, hicieron lo mismo y cada uno patrocinó una letra. De tal manera, Cooper acabó como patrocinante de la primera O, Autry se hizo con la segunda L, a Hefner le tocó la Y y a Williams se le asignó la W.

Aunque siguen siendo característicamente desordenadas, las letras de reemplazo son un poco más compactas, de apenas unos 13.5 metros de alto, pero están hechas de acero.

El diario Hollywood Sign Trust dijo el año pasado que el repintado que se realizó para el centenario del cartel utilizó casi 1.500 litros de pintura e imprimación.

La iluminación del viernes por la noche fue puramente simbólica, dijo el presidente del Hollywood Sign Trust, Jeff Zarrinnam, con solo un pequeño tramo de la segunda L atravesando la penumbra.

A diferencia de la mayoría de los lugares emblemáticos del mundo, el letrero de Hollywood no suele estar iluminado por la noche, en parte debido a las objeciones de las personas que viven cerca.

Sin embargo, según Zarrinnam, podría empezar a brillar de nuevo en breve.

“En lo que estamos trabajando es en un plan para iluminar el cartel en ocasiones muy especiales (...). Tenemos algunos eventos deportivos muy importantes que se celebrarán en Los Ángeles, como la Copa Mundial de la FIFA, tenemos los Juegos Olímpicos (en 2028), así que esos son los tipos de eventos en los que probablemente querríamos iluminar el cartel de Hollywood en el futuro”, subrayó Zarrinnam.