La Bienal de Artes Visuales del Istmo Centroamericano (Bavic) llegará a su décimo aniversario el próximo año con grandes aspiraciones: convertirse en un monumental evento, con mayor participación artística y dirigido a un público más amplio.
Desde 1998 y con una periodicidad de dos años, la Bavic les mide el pulso a las artes reuniendo en alguno de los países del Istmo una muestra de obras contemporáneas de cada nación.
El proceso ha tenido sus altibajos, por lo que para su décima edición, la Bavic se ha propuesto cambiar de modelo para reclutar a más creadores y seguidores.
Miembros de la Asociación Empresarios por el Arte, encargada de la organización de este evento, adelantaron a La Nación algunos cambios que, esperan, darán nuevo rostro a la Bienal.
Según la arquitecta María de la Paz Alice, por primera vez se trabajará en un proyecto curatorial común para toda la región.
Esto quiere decir que, en vez de realizar certámenes en cada país para seleccionar a los artistas que participarán en el evento final, habrá un curador general encargado de definir contenidos.
En esta ocasión, la encargada será la investigadora cubana y experta en arte contemporáneo, Tamara Díaz Bringas.
“El objetivo es trabajar en un proyecto coherente, con un hilo conductor y con temas en común generados desde nuestros países”, explicó Alice.
A Díaz le corresponderá realizar visitas a Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, para reunirse con artistas y conocer sus propuestas. Ella será apoyada en cada país por un curador local.
La cubana explicó que la línea temática se irá definiendo conforme avance en el trabajo.
“Preferí no plantear un tema desde la curaduría pues la idea es erradicar esa tendencia de que los artistas solo reaccionaban ante una convocatoria”, dijo Díaz.
Esto debido a que se empezó a observar que había artistas que solo producían obras para las bienales o bien, se acomodaban al tema escogido en cada ocasión.
Por eso, la décima Bavic se definará a partir de lo que se está produciendo en la región, en vez de exigir obras que respondan a requisitos temáticos.
Andrés Pozuelo, presidente de Alimentos Jack’s y miembro de la Asociación, indicó que otro de los cambios es ampliar los espacios de exhibición, de modo que no se concentre en un solo museo.
“La próxima edición tendrá énfasis en un evento en el que las personas se pregunten cosas. No pensar solo en un concurso dirigido a una élite de artistas que compiten entre sí, ni en un público reducido”, destacó Pozuelo.