Tenemos las consolas más potentes jamás creadas, títulos de última generación y televisores que proyectan una resolución de 4 K.
Hay estudios que se jactan de hacer videojuegos que requieren más de 200 horas para completarse y, sí eso no es suficiente, hay contenidos descargables (DLC) que le agregan más horas a a la experiencia ¡Qué momento para ser amante de los videojuegos!
Lo que pasa es que ya no tenemos tiempo. Hay mucho que jugar, ver, consumir y muy poco tiempo para disfrutar de todas las ofertas de entretenimiento que están ahí disponibles.
Es difícil encontrar un espacio para sentarse en el sillón, encender la consola, esperar que el título del momento realice su actualización de 10 gigas. Es frustrante y agotador.
Bajo estas circunstancias es cuando aprecio más mi Nintendo Switch.
La última consola de la casa japonesa llegó a mí porque era el mejor medio para correr The Legend Zelda: Breath of The Wild, pero con el pasar de los meses se convirtió en uno de mis hardwares favoritos, precisamente porque me da la oportunidad de jugar mis títulos favoritos en cualquier lugar y en cualquier momento.
En noviembre, el estudio de videojuegos Bethesda lanzó Doom y The Elder Scrolls V: Skyrim para el último aparato de Nintendo, su llegada fue bien recibida por el público de los videojugadores.
Si bien es cierto, el Switch está lejos de alcanzar la potencia de otras consolas contemporáneas, pero eso no importa cuando se tiene la oportunidad de cazar dragones en la tierra de Skyrim mientras se espera que el bus de Cartago avance en medio de la kilométrica presa de San Pedro.
Un clásico llega a la portabilidad.
The Elder Scrolls V: Skyrim es un título que s estrenó en el 2011 desde entonces ha sido llevado a la consolas PlayStation 4, Xbox One X, además hay varios modos de juego en la P.C. Es, sin lugar a dudas, uno de los títulos más influyentes en la última década.
La historia se desarrolla en el continente de Tamriel, precisamente en la provincia de Skyrim, ahí el jugador asumirá el rol del Dragonborn y su misión será derrotar al líder de los dragones para evitar el fin de los tiempos.
Este videojuego creado por Bethesda destaca por su extenso universo y la exagerada cantidad de misiones que le encomienda al jugador. Las historias y anécdotas son casi infinitas en el universo de The Elder Scrolls.
Por otro lado, Doom es un recital de balas, demonios y mucha sangre. El ritmo es acelerado como una canción de Thrash Metal que no le da tregua al jugador. Esta versión es ideal para todos los que disfrutan de los videojuegos de disparos de la vieja escuela.
Por ahora, el mayor triunfo de la consola japonesa radica en rescatar la pasión por los videojuegos de los gamers más veteranos y ocupados.