Sospechoso de acribillar a uno de los asesinos de El Gringo va a juicio este martes

Un hombre de apellido Fernández enfrentará a la justicia los días martes y jueves de esta semana en los Tribunales de Pavas, como sospechoso de acribillar a uno de los siete sujetos que mataron al líder narco Erwin Guido Toruño, alias El Gringo.

Cuando los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) capturaron a los homicidas de El Gringo, en julio del 2019, el director del OIJ, Wálter Espinoza mencionó que entre los responsables también figuraba Geidy Mauricio Soto Cascante, de 36 años.

Aunque la Policía le seguía la pista a Soto, éste fue asesinado de aproximadamente 10 balazos, cuatro meses antes de que las autoridades realizaran el allanamiento en el que cayó la banda homicida.

Según el OIJ al menos siete personas de esa banda asesinaron de 136 puñaladas a El Gringo.

Entre los detenidos está el exjugador de fútbol de primera división Alexánder Rodríguez Araya, quien jugó con el Municipal Grecia. Meses después de desligarse del equipo, habría entregado al líder narco a cambio de ¢100 millones.

Otro detenido es el abogado y exfiscal Yashir Wabe Arroyo, de 42 años, quien era el asesor de la organización, según el OIJ.

A Soto lo mataron el 3 de marzo del 2019, cuando viajaba con su primo en un Nissan Frontier y se detuvo en un semáforo cerca de la gasolinera Uno en San Sebastián, San José.

De otro vehículo se bajaron dos sujetos, entre ellos el que va a juicio este martes, y le descargaron el magazine por lo que Cascante falleció en el sitio, al ser alcanzado por las balas.

Jonathan Cascante Salazar, primo del acribillado, también resultó herido en un brazo, pero se recuperó luego.

Aparentemente, Fernández aprovechó la luz roja del semáforo para bajarse del carro en que seguía a Soto y caminó hasta al costado izquierdo del vehículo y le disparó al conductor en múltiples ocasiones.

Acto seguido, Fernández retornó al vehículo que conducía y huyó del lugar a gran velocidad, incluso contra vía.

El caso se manejó como un ajuste de cuentas y ahora Fernández deberá responder por su actuación ante los jueces.

Nueve personas estarán en calidad de testigos en el debate por el homicidio de Soto. Este juicio estaba programado para abril de este año, pero se tuvo que posponer.