Iglesia católica y víctimas de Mauricio Víquez alcanzan acuerdo confidencial

“Como es de conocimiento general, se han presentado demandas civiles por daños y perjuicios en contra de la Conferencia Episcopal y la Arquidiócesis de San José, por parte de cuatro víctimas de abuso sexual del señor Mauricio Víquez”, señaló el comunicado.

“Con el fin de concluir estos procesos, se ha llegado a un acuerdo tomando en cuenta las posibilidades procesales que da la Ley y que es satisfactorio a todas las partes. Conforme a lo establecido en este instrumento, el contenido de este acuerdo está sujeto a una cláusula de confidencialidad por lo que no se darán declaraciones al respecto”, indicó la entidad.

El acuerdo fue confirmado por Rodolfo Alvarado, el abogado de los cuatro ofendidos, quien reiteró que no podía decir el monto debido a los términos del acuerdo.

Este jueves estaba programado el inicio de las conclusiones del juicio por la vía civil de Michael Rodríguez contra la Iglesia católica.

Los otros procesos abiertos eran los de Carlos Muñoz, Anthony Venegas y Josué Alvarado. Este último fue el único que logró llevar el caso por la vía penal, el cual culminó con la condena de 20 años de prisión a Víquez por delitos de violación y abuso sexual cuando Alvarado tenía 11 años.

De igual forma, Carlos Muñoz ya había ganado su caso civil en primera instancia en agosto del 2022, cuando el Tribunal Segundo Colegiado de Primera Instancia Civil de San José condenó a la Iglesia a pagar ¢65 millones “en virtud de la relación de dependencia del exsacerdote Mauricio Víquez Lizano, quien estuvo encardinado en la Arquidiócesis de San José cuando cometió las ofensas sexuales contra el actor y el respectivo encubrimiento de dichas acciones”.

No obstante, el abogado de Muñoz explicó que la iglesia había presentado un recurso ante la Sala Primera, por lo que la sentencia aún no seguía en firme.

Luego de que trascendiera la denuncia de Alvarado, Víquez, de 58 años, huyó hacia México el 7 de enero del 2019. Sin embargo, el 18 de agosto de ese mismo año fue capturado por autoridades de ese país, en atención a la orden de captura internacional que existía contra el excura.

Cayó en San Nicolás de Los Garza, Monterrey, estado de Nuevo León y fue extraditado a nuestro país el 6 de mayo del 2020.