El nombre de Pastor Fernández se asociará por siempre a aquel gol que le hizo a El Salvador y que sirvió para que la Selección de Costa Rica obtuviera su clasificación para el Mundial de Italia 90.
Como siempre ha dicho él mismo, su vida es más que esa histórica anotación que valió el boleto para una Copa del Mundo a la que él no acudió.
En este momento, Pastor Fernández juega otro partido. El exfutbolista de 59 años debe someterse a una operación cardíaca, se encuentra internado en el Hospital México y requiere donadores de sangre. Está estable.
“Hace poco menos de un año a mi papá le detectaron un problema cardíaco. Lo que tiene es un mal funcionamiento de la válvula mitral. Actualmente necesita el reemplazo, o la reparación de la válvula”, relató Fiorella Fernández, quien es hija del exdelantero.
Todo empezó un día que él estaba preparando café. Sentía algo extraño y cayó en cuenta de que estaba con el corazón acelerado.
Pastor Fernández y sus familiares se asustaron y se fueron de inmediato para la clínica.
“En resumen le dijeron que era casi un preinfarto y que como él ha sido tan sano estaba bien y amaneció con taquicardia, pero que en otra persona eso habría sido un infarto”, mencionó la hija del exjugador.
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Desde entonces ha estado con anticoagulante y con un medicamento para controlar arritmias. El martes de la semana pasada fue a una cita de control y le dijeron que no podía aguantar más, que debía internarse para ir al quirófano.
“Él está internado, esperando que le den la fecha para la cirugía, haciéndole unos cuantos tratamientos más, porque estuvo con un tema de retención de líquido que ya se estabilizó”, apuntó Fiorella Fernández.
Y agregó: “Ahorita lo que ocupamos son donantes, porque al ser una cirugía cardíaca obviamente se necesitan donantes de sangre. A eso se le suma que el Banco de Sangre tiene una escasez en este momento”.
Ella sabe que hay chats de exfutbolistas de Primera y Segunda División en los que ha hecho bulla para que acudan a donar sangre.
“Nosotros como familia hasta el momento no hemos hecho un grupo en Facebook ni nada por el estilo. Hemos publicado en las redes sociales propias de nosotros, en las de mis hermanos, en la mía y hasta mi mamá sobre la situación actual. Incluso solicitamos que no sea solo por mi papá, que también vayan a donar sangre para cualquiera”.
A ellos les pasó que quisieron donar sangre en Cartago para Pastor Fernández, pero les dijeron que debía ser en el Hospital México.
“Si es así, no importa, que las personas donen en el lugar que puedan, porque hay muchos que requieren sangre y es muy importante abastecer el banco ante este escaseo”.
Ella contó que su papá ha estado impactado en los meses posteriores al diagnóstico, porque su estilo de vida cambió.
“Principalmente porque él salía a correr bastante y ya eso se lo quitaron, ya no podía jugar bola, ya se cansaba jugando con mi hija y eso lo golpeó bastante”.
En cuanto al ánimo, Pastor Fernández está bien y lo ayuda saber que tantas personas pasan pendientes de él.
“Se encuentra muy agarrado de la fe, de saber que todo es perfecto en el momento de Dios y entonces esperando que le dieran la fecha para la cirugía, que aún estamos esperándola”.
También tomó como causa propia el ayudar a que usen su nombre para más donaciones en el banco de sangre.
“Eso le ha levantado el ánimo, sentir que tiene esa posibilidad de ayudar. En el hospital han sido sumamente comprometidos con él y con los demás muchachos en el cuarto, porque es compartido. Él está muy contento de ver todo el trabajo de los enfermeros, de los doctores y aquí estamos esperando poder dar un granito de arena”, insistió Fiorella Fernández.
Si usted desea donar sangre para él sería en el Hospital México, a nombre de José Pastor Fernández Beita, cédula 1-0604-0591.
Puede hacerlo de lunes a viernes, de 7 a. m. a 3 p. m.; o bien sábados y domingos, de 7 a. m. a 12 mediodía.
Tome en cuenta que debe cumplir cuatro requisitos: ser mayor de edad; no haber tenido hepatitis o enfermedades venéreas, no haberse tatuado hace menos de un año y ser menor de 65 años.