Internautas más extremistas llaman a lanzar una guerra, pero en las calles, las personas son más moderadas y esperan, sobre todo, un regreso a la calma.
La integridad y democracia taiwanesas merecen apoyo, pero no mediante imprudentes provocaciones.
El viaje de Nancy Pelosi a Taiwán es percibido en Pekín como una ‘gran provocación política’.