El intestino está lleno de neuronas similares a las que se encuentran en el cerebro que le permiten ejercer funciones motoras y sensitivas.
Estrés, ansiedad, depresión y hasta el enojo que sentimos puede ser ocasionado por nuestra comida. Preste atención, puede ser que sus emociones las domine el intestino
Se debe a alteraciones de la motilidad y de la sensibilidad digestiva, influenciadas por factores psicológicos, pero las razones varian en cada persona.