En una confesión que dejó helado al tribunal, un exsacerdote francés juzgado en Lyon (centro-este) por pederastia reconoció que durante dos décadas abusó de 'cuatro a cinco niños' cada semana, un escándalo que fue ocultado por la Iglesia.
En una confesión que dejó helado al tribunal, un exsacerdote francés juzgado en Lyon (centro-este) por pederastia reconoció que durante dos décadas abusó de 'cuatro a cinco niños' cada semana, un escándalo que fue ocultado por la Iglesia.