Iglesia en crisis convoca a fieles a Semana Santa: ‘Si el hombre nos defrauda, Jesucristo no defrauda a nadie’

Conscientes de la crisis que enfrenta, a raíz de los escándalos por presuntos abusos sexuales de curas contra menores de edad, las autoridades de la Iglesia católica en Costa Rica, apelan a la devoción de los fieles para celebrar la Semana Santa.

“Nuestra fe y confianza no está en los hombres ni en ninguna persona, sino en Jesús, pero el Jesús que actúa a través de la Iglesia”, manifestó el padre German Rodríguez, prefecto de la catedral metropolitana.

Este es parte del mensaje que todos los sacerdotes del país reforzarán durante las actividades religiosas de Semana Santa, que se inicia este domingo.

De acuerdo con el vocero, los allanamientos judiciales a la curia metropolitana y a la Conferencia Episcopal en marzo anterior, así como las denuncias penales presentadas contra los sacerdotes Manuel Antonio Guevara, Jorge Arturo Morales y Mauricio Víquez, no deberían afectar la relación de los católicos con Dios.

“A nosotros quien nos ha convocado a la fe es Jesucristo y por eso animamos a los fieles a que participen de toda esta celebración para consolidar la fe en Jesucristo que dirige a la Iglesia, que incluso en medio de las pruebas, limitaciones, defectos y pecados que uno pueda cometer, Jesucristo no nos fallará", dijo el padre Rodríguez.

A pesar de reconocer el difícil momento, las autoridades eclesiásticas se preparan para tener la misma asistencia en las parroquias del país, que en años anteriores.

“El pueblo de Dios siempre debe serlo. No estamos en una actitud de decadencia ni de tristeza, todo lo contrario, es el momento de retomar nuestra ilusión en Cristo que no nos defrauda, porque si el hombre nos defrauda, Jesucristo no defrauda a nadie”, dijo el padre.

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Complicada Cuaresma

El 7 de marzo, solo un día después del inicio de la Cuaresma, tiempo litúrgico que antecede la celebración de Semana Santa, los agentes del Organismo de Investigación Judicial allanaron por orden de un juez, la curia metropolitana y la Conferencia Episcopal.

Las autoridades buscaban pruebas contra el sacerdote Manuel Antonio Guevara y el cura prófugo Mauricio Víquez, contra quienes pesan denuncias penales interpuestas por sus presuntas víctimas.

A los procesos judiciales contra los sacerdotes se sumó el caso del cura Jorge Arturo Morales, quien fue capturado el pasado 28 de marzo, cuando intentaba salir del país por la frontera sur, en el puesto en Paso Canoas, Corredores de Puntarenas.

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Morales descuenta tres meses de prisión preventiva, Guevara tiene que asistir a firmar mensualmente a un juzgado, mientras que Víquez se encuentra prófugo de la Justicia.

Estos hechos marcaron la imagen de la Iglesia previo a la celebración de la semana mayor en el credo católico.

De acuerdo con la investigación que publicó este miércoles el Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la Universidad de Costa Rica, la calificación promedio obtenida por esa institución bajó un punto en marzo del 2019.

La Iglesia tenía una calificación de 6,5 (escala 1-10) en la última encuesta realizada en noviembre del 2018. Sin embargo, en solo cinco meses, momento en que se dieron a conocer las denuncias, su calificación promedio decayó un punto; para llegar a 5,5. En abril del 2013, la calificación de la Iglesia fue de 7,2.

Fiesta del perdón

Los hechos polémicos que involucran a la Iglesia no afectaron el compromiso con Dios de cientos de feligreses que acudieron a la llamada fiesta del perdón, una jornada de confesiones organizada por la catedral metropolitana en la que participan 200 sacerdotes, que inició a las 9 a. m. y terminará a las 8 p. m. de este viernes.

Esta tradicional actividad religiosa, tiene como fin que los fieles renueven los votos con Dios previo a la celebración de la Semana Santa, al confesar sus pecados.

La enfermedad de una familiar motivó a Gladis Monge, vecina de Tibás, a volverse a confesar después de 30 años sin hacerlo. Asegura que lo hizo para librarse de los pecados que dice cargar desde hace mucho tiempo.,

“Lo he analizado durante mucho tiempo, entonces vine a respirar, a descargar mis errores que han sido muchos. Tengo una carga enorme, pero vengo a dejarla aquí para sentirme en paz con él. Tengo familiares enfermos, una cuñada que está con cánce,r entonces al ver la muerte así de cerca, a ver si el de arriba me ayuda con perdonarme mis pecados”, dijo la señora.

Marcos Soto aguardaba su turno en una de las bancas de la catedral. El vecino de Tres Ríos, aseguró asistir regularmente a esta actividad para fortalecer su relación con Dios.

“La confesión es una reconciliación con Dios. Él se acerca a nosotros y nos permite perdonar nuestros pecados”, dijo.

La catedral metropolitana dará inicio a la Semana Mayor este domingo, cuando se conmemora la entrada de Jesús a Jerusalén.