El sistema solar sigue premiando a los ticos con otra función espectacular esta semana. Quienes han seguido la posición en el cielo de Júpiter y Venus en los últimos días, los notarán cada vez más cerca y este 1.º de marzo es el clímax del acercamiento.
Este miércoles ambos cuerpos celestes se verán reunidos sobre el firmamento de Costa Rica, en una conjunción que será visible después del anochecer. Quizás el 2 de marzo aún se vean cerca, pero el miércoles será el mejor día.
Alejandra León-Castellá, divulgadora de ciencia y directora de la Fundación Cientec, recordó que serán muy visibles pasadas las 6:15 p. m. y será fácil identificarlos: solo debe volver la mirada hacia el oeste por donde se oculta el Sol y notará sobre la línea del horizonte dos luceros brillantes próximos entre sí.
El que luce más brillante es Venus y los dos estarán a la vista unos 90 minutos, antes del propio ocultamiento de Venus sobre el horizonte.
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“Los dos planetas, el 1.º de marzo, estarán como en diagonal uno del otro, muy cerca y se verán a simple vista pero debemos recordar que se acuestan temprano con Venus, a eso de las 7:48 p. m., cuando baja por el horizonte. Quien tenga telescopio, podría incluso aprovechar para ver las cuatro lunas mayores de Júpiter: Ganímedes, Calisto, Ío y Europa”, aconsejó.
León-Castellá explicó que el lucero más brillante al anochecer es Venus antes de verse las estrellas.
En astronomía, una conjunción es un fenómeno visual de cercanía entre cuerpos celestes, el cual depende de la perspectiva del observador, pues los objetos involucrados en realidad están muy distantes entre sí en el espacio exterior.
La rotación de la Tierra hace que cuando alguien mira las estrellas perciba como si se movieran. Sin embargo, es la Tierra girando sobre su eje mientras orbita alrededor del Sol, lo que produce ese efecto. Eso causa dicha impresión.
Según sea el momento cuando se mire al cielo nocturno, las estrellas parecen estar en un sitio distinto respecto a unas horas antes. Este movimiento natural de la Tierra guarda relación con la posibilidad de ver esos dos planetas en este punto del año y, además, verlos juntarse sobre nuestras cabezas.