Avianca retomó vuelos entre San José y Caracas luego de 6 años de interrupción

La aerolínea colombiana Avianca S.A. reanudó, este 16 de diciembre, sus vuelos entre Caracas (Venezuela) y Costa Rica, después de interrumpir esa ruta en agosto del 2017 en el marco de una profunda crisis en Venezuela, incluidas protestas contra el presidente Nicolás Maduro.

El regreso de esa frecuencia se formalizó con el vuelo AV 668 que partió de Caracas a las 5:12 p.m . hora local y aterrizó en el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, a las 6 p. m., según registros de esa terminal.

La aerolínea había confirmado en noviembre que estos vuelos directos se realizarán tres veces a la semana, los martes, jueves y sábado, entre esa terminal y el Aeropuerto Internacional Simón Bolivar en Caracas, con vuelos previstos a las 11:00 a. m. hora en Costa Rica.

Esa previsión implica una oferta de 1.080 sillas por semana para volar entre ambos destinos, según Avianca S. A.

Un vuelo ida y vuelta el próximo mes de marzo cuesta $200 en clase económica incluidas una pieza de equipaje en la bodega del avión, una pieza en la cabina de pasajeros (carry-on) y un artículo personal (bolso o salveque), precisó la página de reservaciones de Avianca, este 17 de diciembre.

Ese vuelo fue atendido con una aeronave Airbus A320 NEO (neo, acrónimo de New Engine Option) cuyo principal cambio es el empleo de motores de mayor potencia y más eficientes que brindan un consumo de combustible 15% menor respecto a la versión anterior de los A320.

En julio de 2017, Avianca había confirmado también la suspensión en la venta de boletos desde y hacia Venezuela procedentes de Colombia y Perú. Las aeronaves a cargo de esas rutas concluyeron sus desplazamientos el 16 de agosto del 2017.

“Ante las dificultades que viene presentando la operación aérea en Venezuela, Avianca dejará de operar las rutas Bogotá-Caracas-Bogotá y Lima-Caracas-Lima a partir del miércoles 16 de agosto del 2017″, informó entonces la compañía en un comunicado.

Cuando se tomó la decisión, Venezuela atravesaba una profunda crisis que acumulaba entonces un mes de protestas. Los manifestantes pedían la salida del presidente Maduro, en momentos cuando su gobierno impulsaba la elección de una Asamblea Constituyente.