Lineth Saborío, candidata presidencial del PUSC, evalúa eliminar los impuestos cuyo costo de recaudación es mayor al ingreso que generan. “Haremos una revisión exhaustiva para lograr estos objetivos”, respondió la socialcristiana, ante consultas de La Nación. La idea forma parte de la propuesta de “simplificar la estructura tributaria”.
Franco Arturo Pacheco, candidato a la vicepresidencia, explicó que, de 110 tributos vigentes, 8 representan más del 90% de la recaudación. “Independientemente del porcentaje, lo cierto es que la gran mayoría de ellos genera un porcentaje de ingresos muy bajos”, machacó.
Entre los tributos que un eventual gobierno socialcristiano mantendría intactos, están el impuesto al valor agregado (IVA) que, en 2019, recaudó ¢1,63 billones, el 33% de los ingresos tributarios de ese año.
Por otra parte, Saborío mantendría el impuesto único a los combustibles, aunque evalúa cómo reducirlo, así como tributo a la propiedad a los vehículos. El primero, por ejemplo, recaudó ¢552.000 millones en el 2019, el 11% de la recaudación total.
En tanto, con reformas, mantendría el impuesto sobre las utilidades, rentas de capital, remesas al exterior y rentas por trabajo independiente. En resumen, el equipo de Saborío sostiene que mantendría 24 tributos, eliminaría 19 y evaluaría 67.
Sobre los impuestos que permanecerían, Pacheco dijo que eso “no significa que no deban revisarse sus bases, tarifas, estructuras y efectos económicos sobre la producción y consumo nacional, y también las respectivas equidades tributarias intersectoriales”.
Como ejemplo, citó la actual del impuesto sobre la renta, tanto de personas jurídicas como personas físicas con actividades lucrativas, y las que prestan servicios en condición de dependencia laboral. “Tiene tramos tarifarios que crecen muy rápidamente e inciden en la progresividad y afectan el ingreso disponible de empresas y trabajadores; también los montos de deducción por dependientes son demasiado bajos”, señaló el candidato.
Entre los que eliminaría por ser ineficientes, figura el impuesto específico sobre los jabones de tocador que, en el 2019, recaudó el 0,1%, así como venta y autoconsumo del cemento, espectáculos públicos, banano exportado, registro de prendas, de propiedad intelectual y otros.
“Contrario a lo que opinan algunos, varios tributos ‘menores’ se podrían mantener porque sus recursos se dirigen a instituciones o personas para satisfacer fines legítimos, pero, alternativamente, podrían derogarse las respectivas leyes e incluirse los montos en el Presupuesto Nacional para valorar anualmente la conveniencia de mantenerlos, tal y como ha sugerido en repetidas ocasiones la Contraloría General de la República”, apuntó Pacheco.
Dentro de la lista aportada por la campaña de Saborío, figuran 67 que entrarían a evaluación. Se trata de la contribución sobre los sueldos y salarios al Fodesaf, patentes y licencias municipales, cuota patronal al Banco Popular, al consumo de electricidad y al valor de las exportaciones, entre otros.
“Independientemente de la recaudación y del hecho de que ni el Ministerio de Hacienda ni la Contraloría General de la República hayan realizado o actualizado estudios de costo-beneficio para determinar el costo de la recaudación ni cuáles deben derogarse, reformarse o mantenerse, existe la presunción, porque así lo ha expresado la propia Contraloría, de que muchos de ellos son ineficientes.
“Y otros –agregamos nosotros– gravan aspectos específicos de la producción nacional en momentos en que se necesita reactivar la economía, y también para mejorar la competitividad de las exportaciones y la competencia con bienes de origen extranjero. Los impuestos generan distorsiones en los mercados que no solo ponen en riesgo la supervivencia de los negocios, sino que también reducen el ingreso real de las personas”, argumentó Pacheco.
Finalmente, el candidato a la vicepresidencia planteó que evaluarían “exoneraciones, exenciones y exclusiones de varios impuestos (renta, IVA, aduanas), sobre los cuales hay varios estudios y recomendaciones interesantes de la Contraloría General de la República”.
El ministro de Hacienda, Elian Villegas, dijo este miércoles al exponer las cifras fiscales del 2021 que, luego de los seis tributos que recaudaron ¢4,53 billones en 2019, el 84% de todos los ingresos tributarios de ese año, los impuestos restantes aportaron al fisco ¢816.000 millones.
“Es un monto muy importante ,verdad. Es decir, cuando hablamos de que esos otros impuestos no son tan importantes, tenemos que tener mucho cuidado, porque estamos hablando de ¢816.000 millones de colones que representan los demás impuestos, sumando algunos montos que pueden considerarse pequeñitos individualmente, pero que colectivamente son de gran importancia”, advirtió el ministro.