La Habana y Washington. AFP, AP y EFE. El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, pidió el viernes a Cuba hacer progresos en el respeto a los derechos humanos, aspecto que vinculó a la normalización de las relaciones entre ambos países.
Con ese planteamiento puso fin a una visita de 10 horas a la Isla, durante la cual encabezó la ceremonia de izamiento de la bandera estadounidense en la Embajada , recientemente reabierta.
Pero el Gobierno de La Habana insistió otra vez en la necesidad de que su vecino ponga fin al embargo comercial vigente desde 1962 , paso que considera “esencial” para tener unos nexos bilaterales normales.
“No nos vamos a sentar aquí y hablar de normalización (de los lazos) sin avances en todas las áreas, y particularmente tiene que haber algún progreso en el contexto de los derechos humanos, porque no se puede normalizar sin eso”, dijo Kerry.
Su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, no se guardó la respuesta. “También tenemos preocupaciones en materia de derechos humanos en los Estados Unidos (...). No es Cuba un lugar donde haya hechos de violencia racial o brutalidad policial, o se produzcan muertes en hechos relacionados con estos temas”, afirmó en una rueda de prensa conjunta con el secretario de Estado.
En una ceremonia cargada de simbolismos, la bandera de Estados Unidos fue entregada a tres marines que la izaron, los mismos que la habían retirado en 1961, cuando ambos países rompieron lazos diplomáticos.
“Estamos seguros que este es el momento de acercarnos; ya no como enemigos ni rivales, sino como vecinos”, afirmó Kerry.
John Kerry advirtió de que quedaba un “largo” camino por recorrer para la normalización entre los dos países.
El 17 de diciembre del 2014, los presidentes cubano, Raúl Castro, y estadounidense, Barack Obama, anunciaron el restablecimiento de las relaciones.
“Estamos convencidos de que los cubanos estarán mejor con una democracia auténtica, en la que las personas puedan elegir a sus líderes”, manifestó, aunque luego hizo la observación de que “después de todo, el futuro de Cuba depende de los cubanos”.
Comisión conjunta. En este sentido, los dos países acordaron crear una comisión que trabajará en pos de aquel objetivo.
“Hemos acordado establecer este mecanismo para no solo hablar de la relación, sino tomar los pasos necesarios para ver que vaya madurando”, indicó Kerry.
Añadió que la comisión binacional trazará una hoja de ruta y comenzará a reunirse en la primera o segunda semana de setiembre. En este grupo de trabajo se hablará de temas tan disímiles como derechos humanos, seguridad marítima y las compensaciones que tanto piden Estados Unidos por sus empresas nacionalizadas y Cuba por los daños de cinco décadas de hostilidades.
Empero, el eventual avance hacia vínculos más sólidos entre ambos vecinos del estrecho de Florida podrían sufrir un traspié si un republicano vence en las elecciones presidenciales de noviembre del año venidero.
Los republicanos que se disputan la candidatura para desafiar al aspirante demócrata, prometieron el viernes dar marcha atrás a la apertura con Cuba.
“ [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20150814_0011]]La visita de (...) John Kerry[[END:INLINEREF]] a La Habana es un regalo de cumpleaños para Fidel Castro (que cumplió 89 años el jueves). Un símbolo del consentimiento del gobierno de Obama a su legado despiadado”, afirmó Jeb Bush, exgobernador de Florida.
Bush consideró que esta “reconciliación” se hace a “expensas de la libertad y la democracia que todos los cubanos merecen”, por lo que la presencia de Kerry en la Isla es, a su juicio, “especialmente insultante” para la disidencia.
“Que los valientes cubanos cuyo único delito es pedir libertad y democracia estén lejos de la ceremonia de apertura oficial de la Embajada de Estados Unidos es otra concesión a los Castro” , añadió.
El senador Marco Rubio denunció que “el presidente Obama ha recompensado al régimen de los Castro por sus tácticas represoras y su persistente y paciente oposición a los intereses estadounidenses”.
Acusó a Obama de terminar con una política mantenida durante medio siglo por presidentes de los dos partidos y de permitir que el Gobierno de Cuba reciba “legitimidad internacional y un estímulo” “para continuar con su “ represión del pueblo cubano” .
Rubio, como Jeb Bush, prometió revocar esta apertura si llega a la Casa Blanca
El otro aspirante republicano de origen cubano, el senador por Texas Ted Cruz, consideró que la normalización de relaciones con la Isla es “otro mal acuerdo de Obama, (Hillary) Clinton y Kerry” que, a su juicio, “no ayudará al pueblo cubano ni contribuirá a la seguridad de Estados Unidos”.
Los 17 candidatos a las primarias republicanas coinciden en su oposición frontal a la apertura con Cuba, aunque la mayoría de ellos no ha hecho de este tema una prioridad de su campaña.
Por su parte, los candidatos a las primarias demócratas volvieron el viernes a cerrar filas en torno a la política del presidente Obama hacia Cuba y celebraron la histórica reapertura de la embajada en La Habana tras más de medio siglo de enemistad.
“La nueva embajada de Estados Unidos en La Habana nos ayuda a involucrar al pueblo cubano y contribuye a nuestros esfuerzos por un cambio positivo. Buen paso para los pueblos de Estados Unidos y Cuba” , escribió la favorita demócrata Hillary Clinton en un mensaje de Twitter el 1.° de julio, una posición que el viernes reiteró su equipo de campaña.
“Aplaudo al presidente Obama y al secretario de Estado Kerry por avanzar hacia el desarrollo de relaciones diplomáticas normales con Cuba” , opinó hoy en la red social el senador por Vermont y candidato a las primarias demócratas Bernie Sanders.