Johannesburgo. ACAN-EFE. La efensora sudafricana del pueblo, Thuli Madonsela, pidió ayer al presidente, Jacob Zuma, que devuelva parte del dinero público invertido en la costosa y polémica reforma de su residencia privada.
Madonsela hizo público su esperado informe sobre la renovación del complejo que el presidente tiene en la provincia Nkandla, el cual costó unos 246 millones de rands, unos 16,5 millones de euros al cambio actual, justificados por Zuma y el partido gubernamental como “gastos de seguridad”.
Madonsela considera que Zuma debe retornar al Estado el dinero destinado a construir infraestructuras que no están relacionadas con la seguridad, entre las que el informe cita un establo para vacas, un corral para pollos, una piscina y un anfiteatro.
“El presidente debe establecer, con la ayuda de la Tesorería Nacional y de la Policía, el coste razonable de las medidas llevadas a cabo por el Ministerio de Obras Públicas en su residencia privada que no estén relacionadas con la seguridad”, dijo la defensora en su informe.
Además, la defensora del pueblo señaló que Zuma y su familia se han “beneficiado indebidamente” de la reforma.
El mandatario sudafricano tiene ahora 14 días para dar explicaciones ante el Parlamento sobre las conclusiones del informe.
Polémico informe. El Congreso Nacional Africano acusó a Madonsela de tratar de “influir” en las elecciones que Sudáfrica celebrará el 7 de mayo y calificó el informe de “político” antes de que fuera público.
La publicación del documento se ha visto retrasada por los intentos de varios ministros del Gobierno de detener su elaboración, alegando razones de seguridad.
Madonsela ha sido repetidamente alabada en Sudáfrica por su determinación al momento de publicar el informe pese a las presiones recibidas.
El complejo de Nkandla está conformado por varias casas construidas y dispuestas al estilo africano y vastos espacios verdes, donde pastan las vacas del presidente, conocido por su poligamia y su fidelidad a la tradición zulú.
El escándalo le ha costado al presidente numerosos abucheos en actos públicos y la pérdida de importantes aliados políticos.