Dos franco-nicaragüenses declaradas culpables de ‘traición’ en Nicaragua

Jeannine Horvilleur Cuadra, de 63 años, y su hija Ana Álvarez Horvilleur, de 43 años, fueron detenidas el 13 de setiembre junto al marido de la hija, Félix Roiz, de 56 años.

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“Fueron declaradas culpables. La Fiscalía pidió ocho años (de prisión) para mi mujer y mi hija”, dijo el economista nicaragüense Javier Álvarez, exiliado en Costa Rica.

La decisión judicial no ha sido informada oficialmente en Nicaragua.

Álvarez indicó que los tres fueron acusados por la Fiscalía de "traición a la patria", "menoscabo a la soberanía nacional" y "difusión de noticias falsas por redes sociales".

Señaló que Roiz, ingeniero, también fue declarado culpable este miércoles y que la Fiscalía pidió 10 años de prisión para él. Agregó que las sentencias serán anunciadas el 26 de enero.

Álvarez, quien se define como "opositor con un activismo humanitario", relató que unos policías fueron en septiembre a buscarlo a él a su hogar en Managua y al no encontrarlo, se llevaron a su esposa, su hija y su yerno. Desde entonces están en prisión preventiva.

"Mi primera idea fue regresarme a mi país y entregarme, pero está la enorme desconfianza de que hay un régimen que no respeta ninguna ley", dijo el economista de 68 años.

Tras los arrestos, Álvarez declaró que no podía regresar a Nicaragua porque su "vida corre peligro".

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia dijo en setiembre que seguía de cerca la situación y que estaba en contacto con las autoridades nicaragüenses.

Fuentes cercanas al caso consultadas por esta agencia, señalaron que la situación está en conocimiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, del Consejo de Derechos Humanos de la ONU y del Comité Internacional de la Cruz Roja.

Más de 200 opositores están presos en Nicaragua en el contexto de la crisis política que vive el país desde las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega de 2018.

En octubre Álvarez relató al diario digital La Prensa, que ahora se edita en el exilio, que él luchó contra el dictador Anastasio Somoza como miembro del Frente Sandinista, al que se integró en 1975 después de militar en el movimiento cristiano revolucionario.

Además, contó que fue detenido en dos ocasiones bajo la dictadura de Somoza (derrocada en 1979) y se retiró del Frente Sandinista hacia 1995.