Cada mañana de los fines de semana entre 16 y 20 empleados de la firma auditora Deloitte queman asfalto en alguna de las serpenteadas carreteras de Costa Rica, a bordo de sus bicicletas de montaña.
Hasta aquí parecería una simple actividad recreativa entre compañeros de oficina, pero resulta que cada ciclista cuenta con un seguro que los protege en caso de accidente y que es costeado, en su totalidad, por la empresa.
También la firma paga el 50% del costo del entrenador personal para el equipo y proporciona camisetas para los ciclistas.
Alan Saborío, uno de los socios directores de la compañía, explicó que este tipo de incentivos se enmarcan dentro de los programas de responsabilidad social internos, que buscan mejorar la calidad de vida del personal.
Lejos de considerarlos un gasto, Saborío dijo que estos rubros están comprendidos dentro de las inversiones anuales de la empresa.
Deloitte forma parte de un conglomerado de firmas, tanto nacionales como extranjeras, que no solo buscan atraer y retener personal, sino incentivarlos a romper con el sedentarismo y el estrés, que, junto con una mala alimentación, son las principales causas del sobrepeso.
La Nación encontró que empresas como Intel, HP, Hologic, Hospira, Volcano, Bridgestone y Alimentos ProSalud (antes Sardimar) tienen programas diversos, que van desde gimnasios y servicios de terapeuta hasta planes para el bienestar mental mediante una sana administración del dinero.
Ejemplos. María Luisa González, gerente de Recursos Humanos de HP –transnacional con más de 7.000 empleados en Costa Rica– aseguró que estos programas son promovidos desde las altas jefaturas en California, Estados Unidos, sede de la compañía.
Es así como HP desarrolla una iniciativa llamada Wellness (Bienestar) que incluye tres vertientes: salud física, bienestar financiero y manejo de estrés.
Este programa incluye la promoción de caminatas, clases de yoga en los edificios y servicio de nutricionista. Además, la empresa da asesoría sobre administración del presupuesto, en especial –dice González– cuando la media de edad del 66% del personal es de 27 años.
“Hoy en día los empleados no perciben como beneficios lo que antes se concebían como tales, como buenos salarios. Ahora buscan empresas que se diviertan y que vivan; es decir, que no solo haya un desarrollo personal y profesional, sino también emocional y de bienestar financiero”, explicó Andrés Valverde, responsable de Compensación y Beneficios de Volcano.
Esta firma de implementos médicos, con un año y medio en el país, está próxima a inaugurar un gimnasio para sus colaboradores. También vela porque el menú de la cafetería sea balanceado y da charlas nutricionales al personal.
Con Valverde coincidió Éricka Linares, directora de Inversión Social de la Asociación de Empresarios para el Desarrollo (AED).
“Las empresas desarrollan estos programas como una estrategia para su sostenibilidad; esto lleva a su personal a mejorar el rendimiento productivo, porque son colaboradores más creativos e innovadores”, argumentó.
Wilberth Campos, de Bridgestone, reconoció la importancia de tener entre sus filas a un personal motivado.
Esta empresa tiene un gimnasio con un profesional a cargo; servicio de comedor con opciones saludables; programas de medicina familiar y actividades recreativas al aire libre en moto y bicicleta. De hecho, subvencionan las bebidas y las prendas de los deportistas.
En Alimentos ProSalud ofrecen póliza de vida y gastos médicos a las jefaturas; a los cumpleañeros la empresa les da el día libre y todo el personal tiene derecho a tres días libres al año (sin perjuicio de las vacaciones) para que realicen sus “mandados”, detalló Shirley Romero. Además, una vez a la semana costean clases de yoga y de baile.