El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) encontró restos humanos envueltos en bolsas plásticas negras en calle La Granja de Palmares, en una zona muy cercana al límite cantonal con San Ramón. Randall Zúñiga, jerarca de la Policía Judicial, indicó en horas de la tarde, a través de una publicación en X, que se presume que son los restos de Tamara Centeno, la joven de 20 años desaparecida desde el jueves en esa región alajuelense.
Avanzada la noche de este viernes, Zúñiga indicó a La Nación que, por algunas prendas que la familia de Tamara logró reconocer, los restos pertenecerían a la joven. Sin embargo, la autopsia prevista para este sábado arrojará los resultados que esclarecerán toda duda sobre la identidad del cuerpo.
En horas de la tarde, fuentes judiciales cercanas al caso confirmaron que valoraban no abrir las bolsas hasta llegar al Complejo de Ciencias Forenses, en San Joaquín de Flores, para no perder ninguna evidencia.
OIJ encuentra cuerpo dentro de una bolsa que se presume es de Tamara Centeno cerca de calle La Granja en Palmares. El sospechoso está detenido desde hace unas horas y es el cónyuge de 60 años de edad. Un nuevo posible femicidio, que se resuelve aún antes de encontrar el cuerpo.
— DirectorOIJ (@DirectorOIJ) January 24, 2025
La desaparición de Tamara Centeno trascendió este viernes por la mañana, luego de que la familia presentara una denuncia por desaparición ante la Policía Judicial, pues no tenía noticias de ella desde el miércoles.
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Tamara contrajo matrimonio en octubre del 2023 con un estadounidense de 60 años, de apellido Moriondo, quien fue detenido este viernes, horas antes de que se encontrara el cuerpo en una calle de lastre, a 700 metros del Centro Católico de la Divina Misericordia. Según la imagen de Google Maps, se trata de una zona con vegetación frondosa y pocas viviendas cercanas.
Detalles de una desaparición
Tamara y su madre, Andrea Murillo, habían viajado a Europa de vacaciones y regresaron el martes pasado al país. Moriondo fue por ambas al aeropuerto Juan Santamaría; dejó a Murillo en su casa, en San Ramón y continuó hasta El Empalme de Santiago, en el mismo cantón alajuelense, donde vivía con Tamara.
Ese fue el último día que Andrea tuvo comunicación con su hija. El rastro de la muchacha se perdió luego de que ella, al parecer, le revelara a su pareja que tenía cuatro meses de embarazo.
Aunque Andrea le envió mensajes y llamó a Tamara varias veces entre el miércoles y el jueves, no obtuvo respuesta. La señora, en declaraciones dadas el viernes por la tarde a La Teja, sostuvo que Moriondo habría sido el responsable de causarle daño a su hija.
“Obviamente, ellos tuvieron una discusión, no sé por qué asunto, pero sí tuvieron una discusión y él le hizo daño a ella. Después, él intentó quitarse la vida”, declaró la madre de la muchacha.
La madre utilizó una aplicación que permite rastrear la ubicación del celular de Tamara y observó que el dispositivo, aparentemente, estuvo en Barranca de Puntarenas, Palmares y San Ramón.
“En la última ubicación vi que estaba en una clínica en San Ramón. Fui a preguntar si tenían a una paciente con su nombre, pero me dijeron que no. Después encontramos el celular en un basurero cerca de la clínica. Estaba dentro de una bolsa plástica, junto con unas servilletas”, detalló. El teléfono habría sido hallado en un basurero cercano a una licorera en El Empalme, donde hay cámaras de vigilancia.
Fue entonces cuando Murillo acudió a la casa donde residía su hija junto a Moriondo; según relató, no encontró a Tamara, pero sí halló al hombre dentro de un vehículo RAV4 rojo, inhalando monóxido de carbono y con las venas de las muñecas cortadas. Al parecer, intentaba quitarse la vida.
“El carro estaba encendido en el garaje, completamente forrado, y con una manguera que iba desde la mufla hasta la cajuela. Me pareció muy extraño. Me asomé por la ventana, pero no vi nada. Entonces abrí la puerta y encontré al señor (Moriondo) hincado en el asiento trasero, con el rostro hacia el maletero”, relató la madre.
El hombre recibió asistencia médica en el Hospital Carlos Luis Valverde Vega, en San Ramón, y luego quedó a las órdenes de las autoridades judiciales.
Según el Registro Civil, Moriondo y Tamara se casaron el 9 de octubre del 2023, 54 días después de que ella alcanzó la mayoría de edad. Se desconoce desde cuándo sostenían una relación sentimental.
Colaboraron en esta información Fátima Jiménez y Hugo Solano.