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David Guzmán y su familia pasaron momentos de terror, como ellos mismos los llamaron. El incendio que ocurrió en la finca ubicada detrás de su casa los hizo llorar, orar, preocuparse e incluso vestirse de bomberos.
Stacy Montero, esposa de Guzmán, habló con La Nación y dio a conocer el drama que vivieron en su hogar.
“Los niños (Maxi, Gia y Níkolas) no pudieron dormir; fue terrible lo que vivimos. En un momento, ellos lloraban, luego se tranquilizaban y después volvían a llorar. La verdad es que fue una noche muy compleja”, resumió Montero.
La esposa fue más allá y contó que este lunes ninguno de los pequeños fue a la escuela, ya que no pasaron una buena noche. Además, se vieron afectados por pesadillas y pequeñas crisis respiratorias, las cuales fueron controladas con una recomendación pediátrica.
Stacy recordó que mientras su esposo decidió ir a luchar contra las llamas desde su propiedad, ella intentó mantener el equilibrio emocional, pero fue muy difícil.
“Cuando vimos que el incendio avanzaba justo hacia nuestra casa, nos vimos obligados a conectar mangueras a los lados de la casa. Al final, David y mi papá se fueron por cada lado, pero terminaron ahogados y ni sé cómo aguantaron, porque el humo era demasiado”, describió.
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El domingo 10 de marzo estaba siendo un día normal para David y su familia; de hecho, por la noche se alistaban todos para cenar en familia, pero un fuerte olor a humo y un calor insoportable comenzó a impactar sus rostros.
“Vimos de lejos cómo comenzó, eso nos llamó la atención. La finca detrás de nuestra casa es bastante grande, pero no es un charral. Normalmente, ahí hay ganado y caballos, pero por suerte ellos no estaban, porque el fuego avanzó demasiado rápido”, mencionó.
Lo primero que hicieron fue recurrir al 911, pero mientras llegaban los bomberos David tuvo que entrar en acción.
“Fue cuestión de minutos y ya teníamos el fuego encima. Aquello fue una locura; también hubo desesperación para que el fuego no llegara a la casa. Fueron varios momentos de caos que vivimos”, dijo.
La pareja del jugador profundizó en la importancia de que ellos estuvieran en la casa, ya que eso les permitió reaccionar y salvar la propiedad. Otros niños de casas cercanas sí tuvieron que pasar por un proceso de nebulización, según confirmó Stacy Montero.
