Cuando se analiza la mortalidad infantil y se observa el perfil de quienes mueren en el primer año de vida hay algo que llama la atención de primera entrada: esta situación es más común en los hombres que en las mujeres.
Durante 2024, en Costa Rica la mortalidad infantil en los hombres fue de 11,4 por 1.000 nacimientos y en las mujeres de 9,15.
De las 472 muertes en menores de un año en Costa Rica durante 2024, 267 (56,57%) fueron en hombres y 205 (43,43%) en mujeres.
Olga Araya Umaña, coordinadora de la Unidad de Estadísticas Demográficas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), indicó que en Costa Rica solo una vez se ha presentado una excepción: en 2019 hubo una mayor mortalidad en mujeres.
“Hicimos una gran revisión de los datos y vimos que estaban correctos y ese año se invirtió la relación. Fue un año atípico, una excepción, no representó un cambio de tendencia”, aclaró Araya.
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Las razones de mayor mortalidad infantil en los hombres

No hay una sola razón en específico. La pediatra infectóloga María Luisa Ávila Agüero señaló que hay factores biológicos, como diferencias en el desarrollo inmunológico y fisiológico.
“Factor protector XX (refiriéndose a los cromosomas sexuales femeninos, cuyas hormonas se han relacionado con algunos factores protectores en las mujeres)”, resumió.
Los motivos pueden ser todavía más complejos. El neonatólogo Jaime Lazo Behm explicó que esta diferencia entre sexos es todavía mayor en neonatos. “Los hombres somos el sexo débil. Morimos más, somos más vulnerables. (...) Biológicamente (ellas) están más preparadas el momento de nacimiento”, destacó.
Lazo manifestó que desconoce el origen de esta fuerza en las mujeres, pero a lo largo de su carrera lo ha comprobado.
Otros estudios señalan que las mujeres son menos propensas a padecer dolencias perinatales (durante la última etapa de gestación y primeros siete días de vida), anomalías congénitas y enfermedades infecciosas.
No obstante, esto también dependerá de las condiciones que tenga cada bebé para desarrollarse: su acceso a atención en salud y vacunas y al ambiente social que lo rodea.