El expresidente de la República, Carlos Alvarado (2018-2022), defendió las actuaciones del Partido Acción Ciudadana (PAC), el cual quedó fuera tanto del Gobierno como de la Asamblea Legislativa para el periodo actual, y afirmó que actualmente “pareciera que no hay oposición” política.
Las palabras las pronunció frente a decenas de partidarios y funcionarios de su administración (2018-2022), en la develación de su retrato en la sede del PAC en Montes de Oca, San José, el sábado anterior.
“Esta partido tiene vocación de Gobierno; este partido no nació para ser oposición eternamente. Si tenemos que ser oposición, vamos a ser oposición; hoy pareciera que no hay oposición; este partido nació para gobernar”, manifestó el exmandatario.
No ahondó sobre su crítica al Congreso que actualmente está representado por seis fracciones: Liberación Nacional (PLN), el oficialista Progreso Social Democrático (PPSD), Unidad Social Cristiana (PAC), Nueva República (PNR), Liberal Progresista (PLP) y Frente Amplio (FA).
A pesar de la rotunda derrota electoral en las últimas elecciones, el exmandatario defendió logros del PAC como la ruptura del bipartidismo y el matrimonio igualitario.
En ese marco, dijo que su administración defendió la democracia y nunca “dobló rodillas” frente a la dictadura de Nicaragua, en referencia a Daniel Ortega.
“Nadie representa eso”, aseguró el exmandatario sobre los temas de derechos humanos. En su criterio, actualmente las agrupaciones representadas no marcan la diferencia en esa agenda.
Principios del PAC
A su vez, Alvarado se declaró ottonista, en referencia a Ottón Solís, fundador de la agrupación; así como guillermista, en alusión al expresidente de la República, Luis Guillermo Solís (2014-2018).
Aseguró que el partido tiene las condiciones para reunir al centro-progresismo y al centro-izquierda del espectro político. Se declaró un político defensor del Estado, y defendió las políticas que buscaron la protección del Estado Social de Derecho.
En ese sentido, confirmó que durante su administración defendió la agenda proteccionista y por eso se opuso al ingreso de la Alianza del Pacífico, bloque comercial al cual el nuevo Gobierno sí busca ingresar.
“En el PAC creemos en el Estado, hay que decirlo sin miedo, como transformador de la sociedad... porque reduce las desigualdades. No es un Estado totalitario, es un Estado que convive con el sector privado, pero ayuda a atenuar las desigualdades”, manifestó.
Asimismo, rechazó las acusaciones en su contra que lo tachan de neoliberal, incluso dentro de la misma agrupación. “¿Cuántas instituciones privatizamos?, ¿cuántas personas despedimos en el Gobierno?, ¿cuánto destruimos el Estado Social de Derecho?”, reflexionó.
