La cantidad de conocimiento que se acumula a diario sobre el coronavirus es abrumadora, nunca en la historia ha habido tanta gente estudiando y compartiendo información científica sobre el mismo tema de forma simultánea.
En marzo, cuando Tomás Pueyo escribió su artículo “Coronavirus: The Hammer and The Dance”, en el cual clamaba medidas más duras e inmediatas al gobierno de Estados Unidos para aplanar la curva de contagios, el mundo tenía más preguntas que respuestas sobre el virus SARS-CoV-2, causante de la covid-19.
La puesta en práctica de esta estrategia en Costa Rica tiene un problema, y es la traducción. Aquí, se le dice “el martillo y el baile”. Sería muy diferente si la hubieran llamado “el martillo y la danza”.
La diferencia entre baile y danza es sutil, pero muy significativa. El baile representa diversión y entretenimiento, mientras danza es disciplina y entrenamiento.
El baile suele ser libre y cada uno escoge su ritmo; la danza es coreografía y conlleva un alto grado de organización, lo cual contrasta con la espontaneidad en el baile.
Efecto psicológico. Si a eso le sumamos el grupo grande de ciudadanos sin aprecio por su vida y sin respeto por las de los demás, que han convertido el baile en fiesta desbocada, es lógico vivir un descontrol en la cantidad de contagios y muertos en relación con la primera ola pandémica. Siempre estará más cerca el baile de la fiesta que de la danza.
De haberse presentado como danza, es posible que, psicológicamente, fuera más difícil confundir la estrategia con fiesta.
El gobierno también cometió un segundo error al hablar de una “cuarentena en nuestra burbuja social”, término que psicológicamente también está más asociado con la fiesta.
Mucho más en serio se habría tomado el término “cuarentena en su unidad familiar”, como se denomina en otros países.
Tristemente, irresponsables en las redes publican fotografías en sus “burbujas deportivas”, “burbujas laborales” o “buebujas condominales”.
Pero nada de eso es excusa para no asumir con responsabilidad nuestro comportamiento personal durante una pandemia como la que estamos viviendo.
El autor es director general de la Universidad Hispanoamericana.