Columnistas

Ómicron y nuestra miope aldea global

Se presumía desde el principio, pero poco se hizo, y ahora aparecen nuevas facturas

EscucharEscuchar

El viernes pasado, cuando se hizo pública la alerta emitida por científicos de Botswana y Sudáfrica sobre una nueva variante de coronavirus —la ómicron— los mercados accionarios globales cayeron con violencia: entre un 3% y un 5% los europeos y un 2,3% el S&P, principal índice estadounidense. El precio del petróleo se desplomó un 11%. Se activó una cadena creciente de restricciones a los viajes internacionales, que ha puesto nuevamente en vilo la industria de la aviación.








En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.