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Actualmente, los magistrados de la Corte Plena pueden reelegirse de forma automática, salvo que 38 diputados voten en contra de esa continuidad. Foto: (Rafael Pacheco Granados)
Los diputados permitieron el avance, este miércoles, de una reforma al artículo 158 de la Constitución Política para limitar la reelección de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia y permitir que solamente puedan ocupar ese cargo por un máximo de 16 años.
SI el proyecto prospera, ya no se permitiría que los magistrados se reelijan de forma automática, salvo que 38 diputados voten a favor de su continuidad.
La redacción propuesta establecería que los magistrados deben actuar con eficiencia y probidad, y podrán ser reelegidos por única vez, por un periodo igual de ocho años, para lo que deberán contar con el respaldo de dos terceras partes del Congreso.
Actualmente, en cambio, los magistrados continúan en el puesto de forma automática a menos de que 38 diputados voten en contra.
En el plenario de la Asamblea, este miércoles, fue aprobada la admisibilidad de la reforma constitucional (expediente 21.612) que habían impulsado diputados del periodo anterior, encabezados por el independiente Erick Rodríguez Steller.
La decisión tuvo el aval de 39 congresistas de las seis fracciones políticas, mientras que tres liberacionistas votaron en contra: Katherine Moreira, Danny Vargas y Andrea Álvarez.
En el momento de la votación, se ausentaron del plenario otras dos verdiblancas, Kattia Rivera y Montserrat Ruiz, así como Melina Ajoy y Carlos Andrés Robles, de la Unidad Social Cristiana (PUSC).
La congresista Andrea Álvarez declaró que esa reforma le causa preocupación, en parte por la independencia del Poder Judicial y por la estabilidad de la jurisprudencia.
“Si uno lee por qué la Asamblea Constituyente tomó la decisión de que las magistraturas fueran inamovibles en el tiempo, se ve que optaron por un sistema mixto, no totalmente inamovibles, pero con cierta facultad de la Asamblea de removerlas, y me parece que este sistema ha funcionado bien”, dijo.
La liberacionista enfatizó que la preocupación de los diputados constituyentes de 1949 era que hubiera continuidad de las buenas personas en la magistratura. Entonces, cuestiona, “para qué hacer una reforma que solo les permita 16 años y puedan ser removidas”.
Álvarez alegó que la obligación de conseguir el aval de 38 diputados para reelegirse “hace a las magistraturas menos independientes respecto de la política”.
Aunque el jefe del Frente Amplio, Jonathan Acuña, se declaró a favor de que se discuta la reforma propuesta, coincidió con los elementos señalados por Álvarez Marín.
“Aquí tenemos que proteger un asunto de base: la independencia de esos magistrados, porque justamente uno de los problemas que hemos visto acrecentarse es precisamente esa falta de independencia respecto del poder político”, apuntó.
Acuña dijo que se le debe prestar mucha atención al mecanismo de reelección, para evitar que los jueces se conviertan en serviles de los políticos.
La jefa de fracción de Progreso Social Democrático (PPSD), Pilar Cisneros, se manifestó a favor de que, así como los magistrados requieren 38 votos para elegirse por primera vez, también debe ser lo mismo para renovarse en el cargo.
“Yo recuerdo el caso de un magistrado muy cuestionado, con sospechas de corrupción, a quien se le quiso sacar y no se pudo, porque solo hubo 37 negativos, es decir, faltó un voto. Eso no puede ser. Nosotros debemos estar convencidos de la calidad y probidad de los magistrados que van a llegar a la Corte”, dijo la oficialista.
Cisneros también aseguró que ese mecanismo permitiría que llegue a la Corte sangre nueva, y añadió que los esfuerzos para darle a los ciudadanos justicia pronta y cumplida han sido infructuosos. “Creo que va a hacer muchísimo bien para depurar nuestra Corte”, apuntó.
El liberal Jorge Dengo declaró que es tiempo de tener la discusión y examinar de cerca el funcionamiento y el mecanismo para designar los magistrados.
“Contrario a lo dicho, la doctrina más moderna es que la jurisprudencia no se tiene que anquilosar, sino que es bueno cambiar las personas para que la jurisprudencia vaya respondiendo a las realidades sociales. El derecho no debe permanecer estático”, añadió el congresista.