
No termina el drama legal alrededor de la película It Ends With Us (Romper el círculo). Ahora, el asunto se complica de nuevo para el actor y director Justin Baldoni, en su conflicto con la actriz y productora Blake Lively, protagonista de la cinta. El diario estadounidense The New York Times presentó una demanda contra Baldoni, y le exige $150.000 para cubrir costos y daños relacionados con un proceso iniciado por el actor.
El conflicto se remonta a enero. Baldoni interpuso una demanda por difamación contra el medio luego de que este publicara en diciembre un reportaje titulado “‘Podemos enterrar a cualquiera’: dentro de una máquina de desprestigio de Hollywood”, en el cual se afirmaba que Baldoni y su productora Wayfarer habían orquestado maniobras para perjudicar la carrera de Blake Lively. En aquel texto, The New York Times respaldó sus afirmaciones con mensajes y documentos aportados por la actriz.
Baldoni reclamaba inicialmente $250 millones por difamación, pero en junio un juez desestimó su demanda. Tras esa decisión, el diario decidió demandar al actor ante la Corte Suprema de Nueva York, solicitando el pago de los gastos legales generados por la defensa del caso.
En su escrito, The New York Times sostiene que la demanda de Baldoni carecía de fundamento fáctico y jurídico, y solicita que se le conceda el reembolso de costas, honorarios de abogados y, si el tribunal lo estima conforme, una indemnización adicional por daños.
Este movimiento se suma a otra demanda presentada por Blake Lively en setiembre, en la que exige “varios millones de dólares” por daños emocionales. Se prevé una audiencia en marzo de 2026.
Entre los documentos que dejó al descubierto el conflicto se hallan mensajes en los que se lee “Podemos enterrar a cualquiera” o “La narrativa que has creado en línea es buenísima”, así como acusaciones de comentarios inapropiados hacia Lively durante el rodaje, supuestamente sobre su cuerpo, su lactancia o su vida sexual.
Baldoni ha negado las acusaciones y ha contratado estrategas legales y de relaciones públicas para confrontar las demandas. Su agencia WME incluso decidió desvincularse de su trabajo.
El asunto está lejos de cerrarse: la demanda del Times y la de Lively dejan entrever que el caso podría extenderse por muchos meses más.