La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) acordó mantener sus tasas de interés entre 4,25% y 4,50%. Sin embargo, dos gobernadores del comité de política monetaria (FOMC) votaron en contra de tal decisión.
La decisión fue un nuevo desafío a la presión del presidente Donald Trump para recortar las tasas.
El jerarca de la Reserva Federal, Jerome Powell, declaró que la institución aún puede permitirse esperar a conocer mejor la trayectoria de la economía estadounidense antes de modificar los tipos de interés.
Añadió que aún quedan “muchas, muchas incertidumbres” por resolver sobre el impacto de la ola de nuevos aranceles impuestos por el gobierno de Trump a productos que entran en Estados Unidos.
La Fed mantuvo sus tasas debido a que “los indicadores recientes sugieren que el crecimiento de la actividad económica se moderó en el primer semestre del año”, según un comunicado.
La autoridad monetaria afirmó además que el crecimiento económico se ha “moderado”, pero la incertidumbre sigue siendo elevada.
En un comunicado, la Fed explica haber tomado esta decisión porque “los indicadores recientes sugieren que el crecimiento de la actividad económica se moderó en el primer semestre del año”.
La incertidumbre sigue siendo alta, añade.
Seis semanas antes, el banco central había declarado que la incertidumbre había disminuido.
La decisión, ampliamente esperada por los inversores, no fue unánime. De los doce miembros del FOMC dos votaron en contra, una situación inédita en más de 30 años.
Michelle Bowman y Christopher Waller discreparon. El comunicado especifica que abogaban por una rebaja de tipos de un cuarto de punto porcentual.
Ambos gobernadores ascendieron a sus puestos durante el primer mandato de Donald Trump en la Casa Blanca, de 2017 a 2021.
Bowman fue nombrada recientemente, por iniciativa del presidente, vicepresidenta de la Reserva Federal, encargada de supervisar el sistema bancario, y se cree que Waller podría suceder al actual presidente Jerome Powell, muy criticado por Donald Trump.
