Los empresarios turísticos insisten en que los arreglos brindados por la banca al sector, durante el año pasado, son insuficientes para enfrentar el proceso de recuperación que prevén hasta el 2024. En la imagen, turistas extranjeros en la zona de La Fortuna, en San Carlos, previo a la pandemia. Foto: Jeffrey Zamora. (Jeffrey Zamora R)
Las entidades bancarias están en el proceso de estructurar una nueva línea de crédito con el objetivo específico de atender a las empresas turísticas más golpeadas por la pandemia de la covid-19.
La Asociación Bancaria Costarricense (ABC) confirmó a La Nación que formaron un grupo de trabajo para crear una propuesta crediticia, con la cual se analiza la posibilidad de ampliar los plazos de financiamiento y reducir las tasas de interés.
“La ABC instaló un grupo técnico de trabajo que está estructurando una propuesta que se socializará con los bancos para determinar la viabilidad, lo cual representaría un esfuerzo extraordinario al apoyo y acompañamiento diferenciado al sector”, dijo María Isabel Cortés, directora ejecutiva de la ABC.
Cortés explicó que trabajan con los bancos que tienen un porcentaje significativo de la cartera de crédito en turismo.
Francisco Gamboa, director general de Relaciones Institucionales del Banco Nacional, validó que la entidad pública forma parte de ese grupo.
“El Banco Nacional está justamente trabajando, en conjunto con los demás bancos miembros de ABC, para analizar una facilidad crediticia que venga a mejorar las condiciones de refinanciamiento y reestructuración que requiere el sector”, dijo Gamboa.
El Banco de Costa Rica (BCR) también corroboró los acercamientos y solicitud de condiciones crediticias blandas para empresarios del sector turístico.
La propuesta que prepara la ABC se da después de las reuniones sostenidas con representantes de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) y la Cámara Costarricense de Hoteles (CCH) durante este mes de febrero.
Rubén Acón, presidente de Canatur, dijo que en las citas explicaron por qué a la industria turística le tomará más tiempo en recuperarse de los efectos económicos causados por la pandemia.
“Nosotros estimamos que la recuperación será de tres a cinco años. Entendiendo que esperamos alcanzar, en el 2024, los niveles de producción en los que estaba el sector, en el 2019”, afirmó Acón.
El acercamiento entre la banca y los empresarios del sector llega después de meses en los que, tanto Canatur y la CCH, han clamado por un trato diferenciado para los deudores de esta industria. Además de insistir en que medidas como los arreglos de pago, ejecutados el año pasado, eran insuficientes y no acordes con la realidad de las compañías turísticas.
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“Nosotros como sector no estamos pidiendo condonaciones, estamos pidiendo apoyo financiero con el tiempo adecuado para poder sostener las empresas y mantener los empleos”, afirmó el presidente de Canatur.
Ante las quejas del sector privado, el Gobierno emitió una directriz presidencial, el pasado 4 de enero, para favorecer la búsqueda de soluciones con los bancos de capital estatal.
La ABC informó de que, durante el año pasado, el sector turismo recibió de parte de la banca más condiciones beneficiosas comparado con otras actividades empresariales.
“La industria turística requirió una readecuación del 66,9% de las operaciones lo que representó un 67,7% del saldo total adecuado”, subrayó la directora ejecutiva de la Asociación.
La industria turística ha sido de las más afectadas por las medidas sanitarias para contener la pandemia de la covid-19.
En el 2020, el componente del índice mensual de actividad económica (IMAE) llamado Actividades de alojamiento y servicios de comida (donde se ubica el turismo) cayó 49,6% en diciembre 2020, respecto al mismo mes del año anterior.
Peticiones sobre la mesa
El Presidente de Canatur resumió a La Nación las peticiones hechas a la ABC. Entre las mencionadas están la readecuación a un plazo más amplio de los préstamo otorgados a los empresarios, previo a la crisis sanitaria; tasas de interés más bajas y el otorgamiento de líneas crediticias para capital de trabajo.
“Las empresas del sector requieren periodos de gracia y un sistema de pago que vaya acorde de la recuperación. En otras palabras, que al principio nos corresponda pagar menos y, conforme los ingresos vayan aumentando, se pague más. Es un tema de estacionalidad en el negocio”, afirmó Acón.
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El empresario cree que la respuesta del sistema bancario será positiva y espera se dé la otra semana.
Por su parte, algunas entidades financieras destacaron que han brindado condiciones beneficiosas a las compañías vinculadas con esta actividad.
“El sector turismo ha tenido una consideración especial en cuanto a soluciones, siendo que desde el inicio de los programas de apoyo se le han otorgado a ese sector plazos de moratoria de hasta 12 meses, política u opción que queremos destacar, aún se mantiene”, dijo Juan Francisco Rodríguez, subgerente de Negocios del Banco Popular.
Por su parte, Francisco González, gerente de Productos y Segmentos Pymes de Scotiabank, dijo que han mantenido los programas de apoyo a sus clientes; pero reconoció que los productos específicos al sector turismo están inactivos.
“Estamos en la mejor disposición de escuchar las propuestas y necesidades del sector para valorar la factibilidad de un producto específico para las empresas dedicadas a esta actividad”, añadió González.
En el caso del Banco Nacional, la entidad informó de que el 83% de la cartera de crédito, con un saldo de ¢203.000 millones, tuvo prórrogas de pago el año pasado.
“Los nuevos lineamientos de Conassif nos ofrecen una importante vía para continuar este apoyo, enfrentar los vencimientos de operaciones prorrogadas y seguir ofreciendo alivio a la industria del turismo”, manifestó Allan Calderón, subgerente de Crédito y Riesgo.
Para este año la entidad ofrece a sus 912 clientes empresariales turísticos readecuaciones de ampliaciones de plazo de sus deudas, refinanciar deudas con plazos de hasta 20 años con periodos de gracia y recursos para capital de trabajo.