Antes, los algoritmos eran buenísimos para predecir qué querían ver los usuarios y lo entregaban con eficiencia. Después sobrevino la degradación constante del servicio
Si se limpian y anonimizan todos los datos del sector público, el valor que se puede extraer de ese acervo de información es enorme
No me sorprendió para nada leer que inteligencia artificial y computación cuántica son dos de las tres tecnologías estratégicas de China. La tercera sí me sorprendió.
Tenemos mucho ‘brainware’ que aportar. Diseñar nuevos modelos que permitan entrenar y ejecutar inteligencia artificial de manera mucho más eficiente es equivalente a ahorrarnos billones en inversión
Si ya no podemos creer en lo que vemos ni lo que oímos, ¿qué vamos a hacer? Dudar y verificar; no creer en nada que no venga de buena providencia y, aun entonces, verificar
Debemos aprender a utilizar la IA, porque no será la IA la que nos quite el trabajo, será un colega que utiliza la IA mejor que nosotros