“Después del daño emocional que me dejó Grey’s Anatomy me dije: -no más serie de médicos’. Sin embargo acá estoy con ellos, sufriendo y amándolos. De verdad no sé qué me pasa”, expresó una tuitera referenciando al elenco de New Amsterdam, la serie médica que está arrasando en Netflix y ocupa el primer lugar de preferencia entre los ticos.

No decimos la nueva serie, porque no lo es, para nada. Curiosamente, New Amsterdam es una producción reciclada por Netflix, con resultados sorprendentes. Se estrenó en el 2018, por NBC, pero es Netflix la que le está dando el gran puntillazo.

“Es que bueno, está claro. Desde hace años la gente casi no ve cable, algunos solo canales streaming consumen. New Amsterdam, en ese sentido, se ha democratizado y las audiencias le han hallado el gusto”, publicó The Hollywood Reporter.

No es cuento. Aunque New Amsterdam tuvo extraordinarios récords de audiencia cuando NBC la develó en Estados Unidos, ahora con Netflix se revaloró y no solo Costa Rica ha caído a sus encantos. En Chile, Perú, Argentina y otras naciones latinoamericanas está reinando.

Pero, ¿de qué trata New Amsterdam y qué la hace tan adictiva?

Vamos por partes. Lo primero que hay que decir es que, en la ficción, New Amsterdam es el nombre de un inmenso e histórico hospital público, de esos en los que no se necesita tener un seguro médico para ser atendido y cubre a una gran cantidad de población desprotegida.

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El centro médico de la serie, para quienes gustan de los referentes históricos, está inspirado en el legendario Hospital Bellevue, que ubicado en Nueva York es el más antiguo de los Estados Unidos. Se trata de un centro público que, actualmente, tiene más de 7.000 empleados y tiene en su historial una gran cantidad de hitos médicos.

Por si fuera poco, la serie se basa en los relatos de un exdirector del centro médico neoyorquino, Eric Manheimer, quien en el 2013 escribió un libro llamado: 12 pacientes: vida y muerte en el Hospital Bellevue.

Pero adentrémonos en la ficción para entender los entresijos del New Amsterdam, institución médica que está pasando por muy malos momentos. Se encuentra en una mala situación económica y su reputación está en entredicho. En otras palabras, el hospital es un desastre administrativo. Tanto es así que, en un lustro, cinco directores médicos han llegado y también han renunciado. Ahí algo, definitivamente, está fallando.

Pero un nuevo director médico está dispuesto a cambiar las cosas: el doctor Max Goodwin.

Interpretado por Ryan Eggold (The Blacklist), el doctor Goodwin es algo más que un galeno carismático. Es atrevido y no tiene miedo a despedir a quien entorpezca sus planes de acabar con la burocracia y brindar una atención excepcional a los pacientes.

“Él no acepta un “no” por respuesta y demostrará que no se detendrá ante nada para dar una nueva vida al hospital, el único en el mundo capaz de tratar a pacientes con ébola y aceptar bajo el mismo techo tanto a presidiarios como al Presidente de Estados Unidos”, detalla la sinopsis de la serie.

Pero detrás del testarudo y esforzado doctor Goodwin hay un gran drama, o varios dramas, que se enredarán entre historias de amor, la personalidad muchas veces incómoda de sus colegas y los relatos impactantes de las pacientes que atiende.

Durante dos temporadas y 40 capítulos (hasta ahora) las situaciones vividas en New Amsterdam han atrapado al público. Lágrimas, rabia, alegrías e impotencia -todas contenidas en episodios de 43 minutos- explican su adictivo éxito.

Valores: del libro a la serie

“A través de la serie tenemos la oportunidad de crear una conexión emocional con las personas. Puedes brindar una experiencia de la vida de otra persona, como caminar en sus zapatos, lo que creo que puede unirnos y ayudarnos a pensar de manera diferente”, dijo a Deadline Ryan Eggold, sobre el valor de New Amsterdam y sus historias para la gente.

La de Eggold no es solo una expectativa. Desde el libro 12 pacientes: vida y muerte en el Hospital Bellevue, el doctor Manheimer intenta humanizar a los pacientes que atendió durante años, sin estigmas y ni etiquetas.

En el escrito de Manheimer los pacientes que describe son muy distintos: existen dignatarios de ONU hasta prisioneros de máxima seguridad, inmigrantes ilegales y magnates de Wall Street.

En el hospital todos son iguales, pues ante la enfermedad todos somos iguales. No importa de dónde vengamos, ni qué situaciones hayamos vivido.

La anterior es la premisa que pregona Eggold y que los guionistas de la serie buscan implantar. Entendimiento para superar los desafíos de la fragilidad humana.

En la serie, aunque no lo parezca, el propio doctor Goodwin es más que frágil. El secreto de salud que guarda, que también encuentra asidero en el libro, lo demuestra así.

Y ni qué decir de sus enredos emocionales, que lo hacen debatirse entre su sacrificada vocación y su propia familia.

El doctor Max Goodwin parece querer “salvar el mundo”, pero ¿podrá salvar el suyo?

Tercera temporada, con covid-19

Este martes, 2 de marzo, la tercera temporada de New Amsterdam llegó a NBC, en los Estados Unidos. Tal como se suponía la pandemia por la covid-19 es parte de sus nuevos episodios, agregando actualidad y nuevas problemáticas sociales a la trama.

“ Uno de nuestros personajes contrae covid-19 al comienzo de la temporada. En la vida real, todos hemos conocido a personas cercanas a nosotros afectadas por este virus, así que sabíamos que nuestros personajes tenían que pasar por lo mismo”, adelantó David Schulner, uno de los productores de la serie a TVLine.

Pero hay un problema; la audiencia de Netflix ha quedado tan prendida con la serie que no deja de preguntar cuándo llegará la tercera temporada.

Ante tales cuestionamientos, sin embargo, no hay respuesta.

Hasta el momento ni NBC ni el gigante del streaming han realizado ningún anuncio. En el mejor de los casos podría llegar tras su emisión original en Estados Unidos, y en el peor de los escenarios, los fans tendrán que esperar hasta el 2022.

En todo caso habrá que esperar noticias; pues el doctor Goodwin, sin duda, no ha terminado su tarea.