
El regreso del príncipe Harry al Reino Unido volvió a despertar recuerdos de uno de los momentos más tensos de la realeza británica.
Este lunes 8 de setiembre, el duque de Sussex participó en los WellChild Awards 2025, evento benéfico del cual es patrono, y luego se reunió con su padre, el rey Carlos III, tras casi dos años sin contacto.
Sin embargo, no se contempló un encuentro con su hermano mayor, el príncipe William. Se estima que la última vez que conversaron ocurrió durante el funeral de la reina Isabel II, el 19 de setiembre de 2022.
En aquella ocasión, según un análisis de la especialista en lenguaje corporal Judi James, William se convirtió en amortiguador entre Kate Middleton y Meghan Markle, después de que la duquesa de Sussex incumpliera ciertos protocolos.
La caminata en Windsor
Tras la muerte de Isabel II, William y Harry aparecieron juntos con sus esposas frente al castillo de Windsor para saludar a la multitud. De acuerdo con un libro sobre los bastidores de la realeza, Kate calificó ese encuentro como uno de los más difíciles de su vida.
La tensión aumentó cuando Meghan caminó delante de los príncipes de Gales, rompiendo la norma que establece que los miembros de mayor rango avanzan primero. Ante esto, William se colocó entre las dos mujeres y trató de suavizar la incomodidad.
Imágenes de ese momento muestran a Harry guiando a su esposa con el brazo para que no sobrepasara a William y Kate. La escena reflejó el esfuerzo del duque de Sussex por preservar la etiqueta frente al escrutinio mundial.
Cambio de roles
Judi James recordó que, cuando falleció el príncipe Felipe, Kate intentó acercar a los hermanos. Sin embargo, tras la muerte de la reina Isabel II, su posición dentro de la familia real cambió y adoptó una actitud más firme y distante hacia Harry y Meghan.
Mientras William buscaba iniciar conversación con los Sussex, Kate caminó separada, con gesto decidido y el rostro elevado, proyectando una imagen de determinación. Para la experta, esa postura representó una clara señal de distanciamiento.
Harry, consciente de la situación, redujo su paso y sostuvo el brazo de Meghan para marcarle el lugar que debía ocupar. Pese a ello, Meghan intentó acercarse a William y Kate, lo que obligó nuevamente a Harry a contenerla.
Señales de incomodidad
El análisis corporal también destacó gestos de nerviosismo. William y Harry tocaron sus mangas y ropa de manera constante, mientras que Meghan realizó movimientos repetidos con su cabello.
La especialista señaló que Meghan pudo haber esperado que el luto en común generara cercanía con los príncipes de Gales, pero la distancia fue evidente. La caminata en Windsor terminó con William liderando el grupo junto a Kate, y Harry con Meghan detrás, en cumplimiento del protocolo.
Hasta ahora, la relación entre los hermanos continúa marcada por frialdad y no muestra señales de reconciliación.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.