
El rapero estadounidense Kanye West padece de un trastorno de bipolaridad desde hace poco más de tres años, así lo confirmó él mismo el año pasado cuando habló abiertamente sobre su condición.
Ahora, luego de haber dicho que se interesa en ser candidato para la presidencia de Estados Unidos, la familia del rapero está preocupada porque en los últimos días el artista ha presentado un serio episodio de bipolaridad que podría estar expresando en sus declaraciones sobre su posible postulación presidencial.
El medio especializado TMZ confirmó en una nota que el cantante sufre un ataque grave al menos una vez al año y que con información de fuentes cercanas a West confirmaron que justo en este momento está pasando por uno bastante fuerte.
West anunció hace unos días en su cuenta de Twitter que se postulará como candidato presidencial, además confirmó su intención en una entrevista con la revista Forbes en la cual aseguró que fue Dios quien le dijo que se postulara.
En ese artículo Kanye confirmó los detalles que rodean su candidatura: una ruptura con el presidente Donald Trump, que se postularía como republicano si Trump se retira o en su defecto como independiente si no lo hace; además, comentó que nunca ha votado en su vida y que cree que las vacunas son la “marca de la bestia”.
We must now realize the promise of America by trusting God, unifying our vision and building our future. I am running for president of the United States 🇺🇸! #2020VISION
— ye (@kanyewest) July 5, 2020
LEA MÁS: Kim Kardashian como la primera dama de Estados Unidos, ¿descabellado?
Tras estas y otras declaraciones del artista, TMZ asegura que la familia se mantiene preocupada pero con la esperanza de que las cosas se estabilizarán en poco tiempo, algo que ya ha pasado en el pasado.
En una entrevista del 2018 con TMZ, el artista reveló que no toma su medicamento para la bipolaridad porque “sofoca su creatividad”.
Dios le dijo que se postulara
Kanye West cree que Dios le dijo que se postulara para presidente de Estados Unidos, reveló el rapero en una entrevista publicada el miércoles, en la que afirmó que ya no apoya a Donald Trump y expresó dudas sobre la capacidad del demócrata Joe Biden para unir a votantes negros.
En una amplia conversación telefónica con la revista Forbes, el multimillonario reconoció que perdió el plazo para estar en la boleta electoral en varios estados, pero dijo que tomará una decisión final sobre su postulación en los próximos 30 días.
“Hemos estado hablando de esto durante años”, dijo West sobre sus ambiciones presidenciales, en referencia a sus dos partidarios principales: su esposa Kim Kardashian-West y el empresario de tecnología Elon Musk.

A menos de cuatro meses de las elecciones de noviembre, West sorprendió el sábado cuando anunció en Twitter que desafiaría a Trump. “Veamos si la designación es en 2020 o si es 2024, porque Dios nombra al presidente”, dijo West a Forbes.
“Si gano en 2020, habrá sido el nombramiento de Dios”, señaló.
Sin dar detalles de su campaña, la estrella de hip hop que lució una gorra roja con la inscripción “Make America Great Again” –el lema de Trump– en una reunión en el Despacho Oval con el mandatario en 2018, dijo que ya no lo apoya.
“Me estoy quitando la gorra roja con esta entrevista”, sentenció West, de 43 años.
Sin embargo, evitó en gran medida criticar a Trump, excepto por su respuesta a las protestas antirracistas que han conmocionado al país, alimentando las sospechas de que la eventual carrera del rapero sería una maniobra para arruinar a Biden.
“Decir que el voto negro es demócrata es una forma de racismo y supremacía blanca”, dijo West, explicando que se sentía cómodo con desviar los votos afroestadounidenses del candidato demócrata.
Los observadores han indicado que aun si West no estuviera en las boletas electorales, una campaña por nominación directa (write-in) podría dañar a Biden, particularmente en estados bisagra donde Trump ganó por poco en 2016, pero ahora pasarían al lado demócrata.

LEA MÁS: Kanye West ahora quiere llamarse "Christian Genius Billionaire Kanye West”
West, quien reveló que se enfermó de covid-19 en febrero, dijo que desconfía de las vacunas como solución porque han paralizado a “tantos” niños, opinión que contradice ampliamente a la comunidad científica.
“Entonces, cuando dicen que vamos a arreglar la covid con una vacuna, soy extremadamente cauteloso”, dijo. “Esa es la marca de la bestia”.
El presidente Donald Trump consideró “interesante” la eventual candidatura de West para mandatario de Estados Unidos pero estimó que su verdadero objetivo deberían ser las elecciones de 2024.
"Podría. Es muy interesante", señaló Trump en nota publicada este martes en el sitio Realclearpolitics.
“Si lo hiciera, tendría que verlo como un globo de prueba para lo que sucederá dentro cuatro años”, dijo Trump, quien había recibido a Kanye West, uno de sus seguidores más famosos, en La Oficina Oval de la Casa Blanca en 2018.
"Ahora debemos cumplir la promesa de Estados Unidos confiando en Dios, unificando nuestras visiones y construyendo nuestro futuro. ¡Me postulo para presidente de los Estados Unidos! # 2020VISION" tuiteó Kanye West el sábado.
Préstamos por covid-19 financian a Kanye
El empresario, cantante y productor musical estadounidense Kanye West, también considerado como un nuevo multimillonario, es uno de los beneficiarios de los préstamos del gobierno de Estados Unidos creados para ayudar a pequeñas y medianas empresas a superar la crisis de covid-19, informaron el martes medios estadounidenses.
West se benefició de los fondos del Programa de Protección de Cheques (PPP) –préstamos especiales por la pandemia– para su marca de zapatillas, Yeezy, desarrollada en sociedad con la gigante Adidas.
Otro beneficiario potentado es el artista estadounidense Jeff Koons, uno de los más cotizados del mundo y cuya escultura “Conejo” se vendió por $91,1 millones a precio actualizado, un récord absoluto en subastas para un artista vivo.
Además, se han visto favorecidos con el sistema otros famosos como Francis Ford Coppola y Jim Henson (creador de Los Muppets), según datos que publicó el Departamento del Tesoro sobre estos préstamos.
La controversia es la última tras la implementación del PPP, lanzado por el gobierno en abril como un programa clave para salvar empleos inmediatamente después de los cierres forzados por el coronavirus de innumerables empresas y negocios, lo que provocó decenas de millones de despidos.
El programa en su esencia proporciona préstamos condonables a pequeñas empresas afectadas por el coronavirus para cubrir los salarios de los trabajadores y algunos gastos básicos.