
En 2018, el príncipe Harry se casó con Meghan Markle en medio de una gran expectativa pública. El Reino Unido celebró la unión como un símbolo de renovación para la monarquía. Sin embargo, con el paso del tiempo, la relación entre la pareja y la familia real británica se tornó tensa.
Paul Burrell, quien trabajó durante años como mayordomo de la familia real, afirmó en su más reciente libro que los celos de Meghan hacia Kate Middleton surgieron desde el inicio del matrimonio. El texto, titulado The Royal Insider: My Life with the Queen, the King and Princess Diana (El informante real: Mi vida con la Reina, el Rey y la Princesa Diana), se publicó este mes de setiembre.
Según Burrell, los celos comenzaron cuando Meghan descubrió la diferencia entre la residencia que recibió con Harry y la de William y Kate. La pareja fue asignada al modesto Nottingham Cottage, en los jardines del palacio de Kensington. Esta vivienda contaba con dos habitaciones, una sala y una cocina.
La incomodidad surgió cuando Meghan visitó el apartamento 1A del palacio, donde vivían William y Kate. El espacio era mucho más amplio, contaba con un salón de baile y reflejaba un nivel diferente de jerarquía dentro de la monarquía. Meghan habría notado que su residencia no calificaba como una auténtica “residencia real”.
El exmayordomo aseguró que la cultura estadounidense de Meghan generó un choque con las normas y tradiciones reales británicas. A su juicio, Markle nunca aceptó ocupar un lugar secundario respecto a Middleton.
En enero de 2020, Harry y Meghan anunciaron su decisión de abandonar sus funciones dentro de la realeza y trasladarse a Estados Unidos. Paul Burrell sostuvo que este cambio no habría ocurrido si la princesa Diana aún viviera, pues siempre buscó mantener la unidad entre sus hijos.
El libro también reveló que la reina Isabel II ofreció flexibilidad a Meghan. Le habría dicho que podía regresar a la actuación si lo deseaba y le ofreció apoyo directo en caso de tener problemas. No obstante, Burrell consideró que la diferencia generacional dificultó la comprensión entre la monarca y su nieto.
Para el exmayordomo, Harry ahora enfrenta un “exilio autoimpuesto” y dejó atrás la imagen que la prensa británica alguna vez promovió del grupo conocido como “los cuatro fabulosos”, en referencia a Harry, Meghan, William y Kate.
Burrell también señaló que el duque y la duquesa de Sussex intentaron construir una vida paralela, donde podrían continuar con causas propias lejos del control de la institución. Incluso especuló con la posibilidad de que Harry pudiera haber ocupado un rol como gobernador general en Australia o Canadá.
En su análisis, Burrell subrayó que el conflicto de fondo podría estar vinculado con aspectos económicos. Dentro de la monarquía, la pareja no podía generar grandes fortunas como sus amistades del mundo del entretenimiento. A su juicio, buscaron independencia financiera fuera de la realeza, aunque siguen aprovechando su vínculo con ella.
El exmayordomo describió esta situación como una contradicción: Meghan y Harry buscaron separarse de la familia real, pero siguen dependiendo de su conexión con ella para mantenerse vigentes.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.