Meghan Markle, la esposa del príncipe Enrique, acusó a un tabloide británico de haber violado su vida privada. Por ese motivo, la duquesa recurrió a la justicia inglesa y este viernes se realizó la primera audiencia legal sobre el caso.
Específicamente Markle demandó a Associated Newspapers -empresa editora del Daily Mail-, por haber publicado en la versión dominical del diario y en su sitio web extractos de una carta enviada a su padre Thomas Markle, en agosto de 2018.
La audiencia preliminar se mantuvo en el Tribunal Superior de Londres, en presencia del juez, pero con los abogados presentes mediante videoconferencia debido a las restricciones impuestas por el nuevo coronavirus (covid-19).
El abogado de la defensa, Anthony White, rechazó algunas acusaciones hechas por la exactriz estadounidense de 38 años, según la cual los diarios eran responsables de causar la separación entre padre e hija.
Markle alegó que los periodistas habían "manipulado y explotado" a su padre "vulnerable" antes de publicar la carta.
Associated Newspapers, por su parte, niega haber violado la vida privada de la duquesa al publicar su misiva, así como de haberla modificado para cambiar su sentido.
White aseguró que el editor no había "actuado deshonestamente" al resumir o editar partes de la correspondencia, sino que se trataba de una práctica periodística común.
Caso aparte.
Este proceso constituye una acción judicial separada de la denuncia del príncipe Enrique, sexto en el orden de sucesión al trono británico, contra otros grupos de prensa a los que acusa de haber interceptado mensajes vocales privados.
Actualmente instalado en California junto a su esposa, el príncipe de 35 años denunció varias veces la presión despiadada de los medios sobre la pareja. Esta fue la razón principal de su decisión de abandonar sus funciones como miembros de la realeza británica, anunciada en enero y efectiva desde principios de abril.
“Perdí a mi madre y ahora veo como mi esposa se convierte en víctima de las mismas fuerzas”, denunció hace unos meses, en referencia a su madre Diana, fallecida el 31 de agosto de 1997 en un accidente de coche en París, cuando era perseguida por los paparazzi.
El Daily Mail forma parte de los cuatro diarios sensacionalistas británicos con los que la pareja real anunció que cortaba relaciones, acusándolos de informaciones “tergiversadas, falsas e invasivas, más allá de lo razonable”.