
El príncipe Harry, de 41 años, estaría cuestionando su matrimonio con Meghan Markle, actriz de la serie Suits, con quien mantiene una relación desde 2016. Así lo indicó el sitio Radar Online, citando a fuentes cercanas al hijo menor del rey Carlos III.
El detonante habría sido la reciente decisión de su exnovia Chelsy Davy, de 40 años, de mudarse con su esposo y sus dos hijos a las islas Mauricio, un destino conocido por su tranquilidad. La empresaria sudafricana mantuvo una relación sentimental con el duque entre 2004 y 2009.
Mientras Harry construyó una nueva vida en California junto a Markle, alejado de la Familia Real y envuelto en controversias mediáticas, Davy consolidó su carrera en Londres, enfocada en el turismo y la joyería. Su estilo de vida discreto y alejado del foco público habría hecho que el príncipe reconsidere decisiones del pasado.
Según el medio estadounidense, allegados al príncipe afirmaron que la noticia de la vida tranquila y familiar de Chelsy Davy le afectó profundamente. Las fuentes sostienen que él solía considerar a Davy como la única persona capaz de comprender los desafíos únicos de su posición dentro de la realeza.
Uno de los informantes aseguró que el príncipe se ha mostrado reflexivo y nostálgico, preguntándose cómo habría sido su destino si no se hubiera separado de Chelsy. Otro agregó que estos pensamientos de arrepentimiento se han vuelto recurrentes, junto con el temor de haber cometido errores que no se pueden revertir.
Las comparaciones entre ambas mujeres parecen inevitables para el duque. Davy ha mantenido una vida sin sobresaltos públicos, lo que contrasta con los múltiples conflictos y exposiciones mediáticas que han rodeado a Harry y Meghan desde 2020. Estas incluyen rupturas con la familia real y proyectos comerciales poco exitosos.
El medio también reportó que Harry ha expresado que su vida con Davy era menos complicada. Verla disfrutar de una cotidianidad serena le habría generado una mezcla de emociones. Esto se intensifica al observar que la realidad que vive en Estados Unidos no se asemeja al estilo de vida prometido cuando dejó sus funciones reales.
Fuentes cercanas aseguraron que, en ocasiones, el príncipe se siente atrapado en un entorno donde todo lo que él y Meghan hacen debe generar ingresos, mientras enfrenta las expectativas de mantener una imagen pública destacada. También destacaron que uno de los motivos principales por los cuales dejó la realeza fue para escapar precisamente de esa presión constante.
Por otro lado, Ingrid Seward, biógrafa y especialista en la Familia Real, comentó al medio británico The Mirror que uno de los factores que influyó en la separación entre Chelsy Davy y el príncipe fue la rigidez del protocolo real. No obstante, también indicó que la nueva vida de Harry tampoco resultaría atractiva para su antigua pareja.
*La creación de este contenido contó con la asistencia de inteligencia artificial. La fuente de esta información es de un medio del Grupo de Diarios América (GDA) y revisada por un editor para asegurar su precisión. El contenido no se generó automáticamente.
