
El título del más reciente álbum de Debi Nova, Todo puede convertirse en canción, alude a los múltiples puntos de partida de sus composiciones y a esa habilidad suya para encontrar inspiración en lo cotidiano. Escuchar esas piezas cobrar vida en concierto permitió constatar el efecto tangible que sus obras tienen sobre la audiencia.
Parque Viva fue el escenario de la presentación oficial del disco, en una cita que también celebró los 15 años de carrera de la artista y es el punto de partida para una gira que se extiende a Sudamérica. El espectáculo cumplió con creces su propósito: cautivó, contagió energía y despertó emotividad.
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Quedó claro que Debi no solo convierte todo en canción, sino que transforma cada tema en un punto de encuentro con el público, en relatos auténticos que conectan desde la emoción y la honestidad.
Las canciones brillaron por sí mismas, pero también gracias a una producción técnica de alto nivel: sonido impecable, iluminación precisa, atractivas proyecciones, elegantes sobretarimas, vestuario para diferentes ambientaciones y una puesta en escena cuidadosamente concebida para cubrir estratégicamente las amplias dimensiones del escenario.
La banda de lujo ofreció una interpretación nítida y versátil, navegando con naturalidad entrebolero, balada, reggae y pop. Además, la inclusión de vientos aportó frescura a piezas como No nos sobran los domingos y encanto al arreglo original de Perdidx en la Ciudad. Puntos extra para el arpa en Brindo, una joya magistral y conmovedora.
Hubo también momentos más enérgicos, como en Tu manera de amar, Cupido y el cierre con Drummer Boy y Dale Play. En algunos de esos cortes la presencia de un octeto de bailarinas añadió dinamismo y sorpresa, reforzando la coherencia conceptual de cada segmento y manteniendo la atención del público en todo momento. Fue una noche como esas que uno quisiera poder vivir otra vez.

Si mis registros no fallan, Debi es apenas la segunda artista costarricense de música original en ofrecer un concierto en solitario en el Anfiteatro Coca-Cola, precedida solo por Malpaís. Este hito destaca tanto por su realización como por su calidad.
La propuesta sobrepasó la factura de muchos espectáculos internacionales recientes. Es un motivo de orgullo saber que detrás de Debi hay un equipo técnico y artístico costarricense de primer nivel, algo que la artista reconoció con generosidad al mencionar sus nombres desde el escenario.
Así como la velada comenzó con la dupla Berenice y Eddy Monge, quienes conectaron con el público a través de sus composiciones originales durante más de veinte minutos, ojalá ese escenario siga abriendo espacio a más talentos locales de música propia.
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Lo de que Debi haya tenido este espacio para ella y su repertorio es fruto de su trabajo tesonero. Eso mismo es una fuente de inspiración para quienes buscan crecer como artistas, y para una audiencia que agradece encontrarse con una intérprete capaz de lograr que todo pueda convertirse en canción.
EL CONCIERTO
ARTISTA: Debi Nova
INVITADOS: Berenice y Eddy Monge
LUGAR: Anfiteatro Coca Cola
FECHA: 18 de octubre
ORGANIZACIÓN: BLieve