A sus 99 años, Dick Van Dyke confesó que considera una “maldición” haber vivido tanto tiempo. La estrella de Hollywood, recordado por la cinta Mary Poppins, reflexionó sobre el dolor de ver partir a quienes ama, mientras él sigue con vida.
Durante una entrevista en Malibú, California, acompañado por su esposa Arlene Silver, el actor recordó la muerte de su amigo Ed Asner en 2021. Ambos soñaban con realizar una nueva versión de La extraña pareja, pero no lograron concretarla.
“Hubiera sido muy divertido y lo perdimos. He perdido a muchos amigos, “Esa es la maldición de vivir casi 100 años”, dijo Van Dyke, según la revista People.
A pesar de ese dolor, Silver aseguró que su esposo se ha mantenido “muy positivo” mientras se despedía de sus amigos y compañeros de trabajo. “Bueno, la vida ha sido buena conmigo. No me puedo quejar”, expresó Van Dyke.

La pareja, casada desde 2012, habló también sobre su relación. “Nos llevamos muy bien. Todo el mundo decía que no funcionaría, pero acá estamos”, dijo el actor, en referencia a su diferencia de edad de 46 años.
“Simplemente nos preocupamos mucho el uno por el otro”, añadió Silver, quien bromeó al decir: “La gente de la misma edad no dura”.
La estrella de Chitty Chitty Bang Bang cumplirá 100 años en diciembre y planea celebrarlo con una gran fiesta. Atribuyó su buena salud a una rutina de ejercicios constante. “Siempre he hecho ejercicio, tres días a la semana”, dijo en enero en el pódcast Where Everybody Knows Your Name.
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“Me agacho, hago muchos estiramientos y también yoga”, explicó. Usa un equipo de entrenamiento que le hace sudar todo el cuerpo.
En los últimos meses, Van Dyke vivió una situación dramática. Su mansión en Malibú fue alcanzada por las llamas durante los incendios de diciembre pasado. “El fuego venía de la colina, se podía ver”, recordó en una entrevista a finales de 2024.
“Estaba tratando de arrastrarme hasta el auto. Estaba realmente exhausto. No podía levantarme”, relató. “Entonces aparecieron tres vecinos y me salvaron”.
Van Dyke agradeció profundamente a quienes lo ayudaron.

Aunque él y su esposa escaparon sin lesiones, vivieron momentos de angustia porque una de sus mascotas desapareció durante la evacuación. “Arlene y yo hemos sido evacuados sanos y salvos con nuestros animales, excepto Bobo, que escapó cuando nos íbamos”, escribió en Facebook, refiriéndose a uno de sus gatos. “Estamos orando para que él esté bien y para que nuestra comunidad en Serra Retreat sobreviva a estos terribles incendios”, añadió.
Días después, una vez controlado el fuego en la zona, Bobo apareció. “Encontramos a Bobo tan pronto como llegamos a casa esta mañana”, escribió junto a una foto del gato anaranjado.
“Hubo tanto interés en su desaparición que llamaron a Control de Animales para que ayudaran. Pero, afortunadamente, fue fácil encontrarlo y no sufrió daño alguno”, relató al compartir el final feliz de la historia.