Un hombre de 57 años creó perfiles falsos en redes sociales y desde ellos hizo al menos 50 publicaciones en las que, presuntamente, ofendió a su antiguo jefe.
El hecho lo dieron a conocer este miércoles tanto el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) como el Ministerio Público mediante boletines de prensa, en los señalan que el implicado es un individuo de apellidos Moya Flores.
La captura del sospechoso se produjo el martes en su casa en Lagunilla de Heredia. Luego fue indagado y se le comunicaron los cargos.
Posteriormente se le abrió un proceso penal por el delito de suplantación de identidad, que es castigado en el Código Penal con pena de prisión de uno a tres años. Este hecho es considerado como un delito informático y está vigente desde abril del 2013.
Pesquisa
Según la información policial, la pesquisa de este caso inició el 14 de agosto del 2018, pues en esa fecha un empresario se presentó a las oficinas del OIJ de Heredia para denunciar que un desconocido estaba realizando comentarios ofensivos por redes sociales y utilizaban su nombre.
Agentes de la Sección de Delitos Informáticos de la Policía Judicial, luego de varias diligencias policiales. lograron detectar que los equipos electrónicos utilizados para la creación de las cuentas y la utilización de las mismas se ubicaban en una vivienda localizada en Lagunilla de Heredia. Asimismo, en ese momento fue que se logró identificar al sospechoso.
Esta martes se allanó la vivienda de Moya donde, además de detenerlo, se decomisó evidencia importante para la investigación, entre ella: tres computadoras y un teléfono celular.
Moya fue trasladado a la Fiscalía Adjunta de Heredia donde se le tomó la declaración indagatoria y se le identificó plenamente. Luego lo dejaron en libertad debido a que la Fiscalía corroboró que el sospechoso cumple con todos los arraigos procesales (laboral, domiciliar y familiar) para permanecer vinculado al proceso penal.
Aunque las órganos judiciales no precisaron el hecho que motivó a Moya a realizar las publicaciones, sí se informó que el asunto se presentó luego de que el imputado fue despedido de la compañía.
El delito de suplantación de identidad, según el artículo 230 del Código Penal, sanciona con prisión de uno a tres años “a quien suplante la identidad de una persona física, jurídica o de una marca comercial en cualquiera red social, sitio de Internet, medio electrónico o tecnológico de información”.