
Una operación antidrogas ejecutada con apoyo de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) terminó con la muerte de un ocupante de una embarcación y el decomiso de aproximadamente dos toneladas de cocaína en aguas del Pacífico Sur.
La información fue confirmada este sábado por el Ministerio de Seguridad Pública. “La detección de la embarcación sospechosa se dio en horas de la noche de ayer (viernes para el lector), gracias a la rápida respuesta efectuada por el Grupo de Operaciones Especiales (GOPES) del Servicio Nacional de Guardacostas, que comenzó la persecución en mar frente a Pavones de Golfito”, informaron las autoridades.
Los sospechosos, al notar la presencia policial, emprendieron la huida pero encallaron de forma violenta. Agrega el comunicado que la maniobra de evasión tuvo consecuencias fatales: “producto del impacto generado al encallar la embarcación, uno de los ocupantes cayó al suelo”.
Los oficiales de Guardacostas coordinaron de inmediato con la Cruz Roja cuyos paramédicos declararon fallecido en el lugar al hombre, de quien se desconoce su identidad; agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Corredores, hicieron el levantamiento del cuerpo.
Un detenido, un fugitivo
Las autoridades reportaron la detención de un sujeto de nacionalidad ecuatoriana de apellido Cacierra, como sospechoso de participar en este evento, mientras que otro ocupante logró escapar.
Para localizar al fugitivo, se hizo un amplio despliegue que incluyó el apoyo de un avión del Servicio de Vigilancia Aérea (SVA) que sobrevoló la zona durante mañana del sábado. Además, oficiales de la Fuerza Pública mantienen la alerta con el fin de ubicar al fugitivo.
La embarcación decomisada es una lancha de bandera costarricense de 32 pies de eslora (largo), impulsada por dos motores fuera de borda, cada uno de 350 caballos de fuerza.
En el operativo participaron el Servicio Nacional de Guardacostas, la Policía de Control de Drogas (PCD), la Unidad Especial de Apoyo (UEA) y la Dirección de Inteligencia y Análisis Criminal (DIAC).
La PCD, en coordinación con la Fiscalía, se encargaron de establecer la cantidad del estupefaciente decomisado en la embarcación y que superaría las dos toneladas de cocaína.