Dos hombres fueron sentenciados este martes a 12 años de prisión, cada uno, luego de que el Tribunal Penal de Pavas los declara culpables de transportar 855 kilos de cocaína.
El hecho ocurrió en enero del 2024 cuando dos oficiales del OIJ de Heredia colaboraban con una regulación de tránsito, tras el choque leve de una camión remesero y una moto cerca del puente de Lindora, en Santa Ana.
En ese momento descubrieron un falso taxi del aeropuerto y a sus ocupantes en actitud sospechosa. Al revisar su interior, detectaron la carga ilegal. Los sentenciados son un costarricense de apellidos Badilla Arrieta y un mexicano apellidado Pacheco Arrendo.
Los jueces declararon a los hombres autores responsables de un delito de transporte de drogas cuyo cargamento llevaban en un microbús anaranjado, similar a los de transporte de pasajeros del aeropuerto Juan Santamaría.

La presidenta del tribunal, Meibel Chevez, explicó que el daño a la salud pública iba a ser muy grande en caso de que ese cargamento, valorado en más de ¢6.000 millones, hubiera llegado a las calles: “Cada costarricense con esa droga podía tener una dosis”, dimensionó Chevez al explicar el por tanto, también suscrito por sus compañeros del tribunal, Kenneth Alvarado Aguirre y Krissia Quirós Villalobos.
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La juzgadora también reprochó al imputado de apellidos Badilla Arrieta el hecho de que al ser padre de un adolescente, intentara que el cargamento fuera comercializado.
“Ese daño a la salud va muy conectado con el tema de la juventud y conforme a las reglas de la lógica la droga va predispuesta para la población joven, eventualmente como su hijo, con edades adolescentes o personas jóvenes”, argumentó la jueza.
Ambos sentenciados pasarán seis meses más en prisión preventiva hasta que el fallo adquiera firmeza.
