Nueve sospechosos de intentar exportar más de 5 toneladas de cocaína a Europa están a la espera de que se realice una audiencia de medidas cautelares en su contra, prevista para este viernes a las 8 a. m. en en una sala del Primer Circuito Judicial de San José.
Aunque la causa del caso Embassy la tramitan jueces del Juzgado Penal de Limón, la sesión se realizará en la capital, por razones de seguridad. Los detenidos responden a los apellidos Paniagua Moya, Paniagua Corrales, Alvarado Campos, Lobo Córdoba, Rodríguez Álvarez, Arias Corrales, Rodríguez Bado, Rodríguez Arguedas y Pérez Araya, según precisó la Fiscalía Adjunta Especializada en Delincuencia Organizada (FAEDO).

Ocho de ellos quedaron detenidos este miércoles, luego de 20 allanamientos realizados en Pital, Agua Zarcas, Muelle, Boca de Arenal y La Fortuna de San Carlos, así como en San Ramón, Ciruelas y El Roble de Alajuela; Sabana, en San José y otros sitios en Cartago y Limón.
El noveno sospechoso, Pérez Araya, fue capturado este jueves.
“Una décima persona, de apellidos Arias Rodríguez, fue detenida en los operativos; sin embargo, tras analizarse su situación jurídica, se determinó que puede continuar apegada al proceso sin la necesidad de cumplir medidas cautelares”, agregó el Ministerio Público, en un comunicado.
Inicialmente la Fiscalía anunció que los operativos iban dirigidos a la captura de 12 personas, pero, “tras valoraciones propias de la investigación, el Ministerio Público determinó únicamente detener a 10 personas”.
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Modo de operar
A estos individuos se les asocia con dos grupos criminales, asociados con delincuentes en Europa, que se encargaban de realizar sofisticados envíos de cocaína al Viejo Continente.
Se cree que, desde las plantas empacadoras, camuflaban la droga en paquetes de harina de yuca, piñas enteras, pulpa de piña empacada en cajas con doble forro, así como en yucas y malangas, que luego sellaban con parafina.
También utilizaban palets de madera (tarimas), chatarra compactada y los sistemas de refrigeración de los contenedores para esconder el estupefaciente.
El Ministerio de Seguridad Pública detalló que el primer decomiso a estos grupos ocurrió en Bélgica en el 2022, cuando las autoridades de ese país hallaron 270 kilos de cocaína en un contenedor. Ese envió era para un destinatario identificado como Embassy, de allí el nombre del caso.
Las organizaciones siguieron operando incluso después de julio del 2023, cuando el Gobierno de Rodrigo Chaves instaló escáneres en la Terminal de Contenedores de Moín (TCM), por lo que la Fiscalía presume que los sospechosos lograron burlar los dispositivos de seguridad.
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Desde que se abrió la pesquisa, a estos grupos se les vincula con la incautación de 3.513 kilos de cocaína que lograron llegar a diferentes puertos en Róterdam, Holanda; Setúbal, Portugal; Amberes, Bélgica, Alemania y España, y otros 1.888 kilos que no lograron salir de de la TCM o de la terminal Gastón Kogan, en Limón.
Esta operación, que contó con el apoyo de cuerpos policiales en Países Bajos, Bélgica, España, Portugal y Alemania, incluye la detención de 25 personas en aquel continente. Entre ellas, un costarricense de apellidos Ramírez Morales, capturado en Sevilla, España, en una operación de la Guardia Civil española, en una fecha no precisada. Él permanece en prisión.
La investigación corresponde al expediente 23-000224-0622-PE.
