
Carmen María Martínez Flores despidió la mañana del lunes con una bendición a su nieto Rodrigo Antonio Manzanares Ramírez. Esa fue la última vez que lo vio con vida. El joven de 21 años, conocido como Kiwi, fue asesinado esa tarde de varios balazos en la barbería donde trabajaba, en San Rafael Abajo de Desamparados.
Manzanares presentaba heridas de bala en la cabeza, el tórax y la pierna derecha, según confirmó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ). El ataque ocurrió al costado norte de un centro comercial, frente a la barbería.
Una cámara del local captó el momento en que el sicario disparó en múltiples ocasiones y de forma atropellada hacia el interior. Se escuchan 21 disparos y uno de ellos también alcanzó a un cliente de 17 años que resultó herido y trasladado al hospital San Juan de Dios. Según informaron fuentes policiales está fuera de peligro,
Doña Carmen conversó con La Nación sobre las últimas horas que compartió con su nieto, recordó que le hizo desayuno y luego lo despidió en la puerta. “Me besó, me abrazó y me dijo échame la bendición, se la di y en eso vino el Uber, se montó y se fue”, relató la mujer.
Rodrigo estudió durante más de un año para ser barbero y se dedicaba completamente a ese oficio. Poco tiempo después de graduarse enfrentó un cáncer por el que le amputaron la pierna derecha, según recordó su abuela, “Hace dos años le dio cáncer y le operaron su piernita, hace año y medio los doctores le dieron de alta y trabajaba, él solo iba de la casa a la barbería, venía a almorzar a mediodía, a cenar y se acostaba”, explicó doña Carmen.
La abuela detalló que dos horas antes del homicidio habló con el joven por última vez. ”Le dije: ‘¿Rodrigo va a venir a cenar? - Sí. abuelita ya llego, solo voy a rasurar a un cliente, entre 5 y 5:30 llego a cenar y me quedo acostado me dijo", pero pasó lo que pasó y ya no volvió nunca”, recordó con dolor.
Doña Carmen aseguró que su nieto no tenía problemas con nadie. “Por eso es que estamos paralizados, él no se metía con nadie, tenía amistades de chiquillos como toda la juventud, pero no sabemos por qué le hicieron eso, estamos totalmente sorprendidos, con un dolor profundo”, expresó.
Segundos de horror
Un testigo del crimen, quien pidió mantener su identidad en el anonimato, detalló que pudo ver el momento en que llegaron los sicarios. “Vi cuando se bajó un muchacho de una moto, el otro quedó ahí esperando y después ya escuché como unos 7 u 8 balazos tal vez, lo que hice fue alejarme porque obviamente alguna bala podía pegarme, todo fue muy rápido, ellos nada más llegaron, pegaron los balazos y se fueron”, relató.
El hombre recordó que los atacantes andaban con camisetas manga larga y cascos, lo que dificultó su identificación. “Ya después escuché que un muchacho salió gritando mataron a Kiwi, mataron a Kiwi, que era uno de los barberos”, agregó.
Este martes por la mañana, además de los curiosos que pasaban asomándose, los arrendatarios del local estaban sacando todos sus bienes.
En este 2025, la provincia de San José es la más violenta ya que según datos del OIJ reporta a hoy 227 de los 671 homicidios que han ocurrido en todo el país.