El Juzgado Penal Especializado en Delincuencia Organizada (JEDO) ordenó un año de prisión preventiva a 22 miembros del cartel del Caribe Sur, la organización criminal dedicada, en apariencia, al tráfico internacional de cocaína.
Se trata de Mora García, Méndez Nájera, Aguilar Arguedas, Muñoz Ewers, Cortés Madrigal, Mc Kenzie Mc Kenzic, Brown Montoya, Chavarria Obando, Rivera Salazar, Alvarado Calero, Chacón Matarrita, Díaz Ariieta, Rodríguez Morales, Guzmán Duarte, Suárez Herrera, Presida Grijalba, Ordoñez Ramírez, Quesada Pita, López Arguello, Ampie Carmona y Ramos Sánchez, quienes en apariencia pertenecen a la agrupación criminal.
Entre ellos figura también la abogada Anita McDonald, quien integró la Junta Directiva del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura en 2015 y es suegra del presunto cabecilla Luis Manuel “Shock” Picado Grijalba. Él, junto con su hermano Jordie “Noni” Picado Grijalba, lideraba la estructura criminal.
Ambos costarricenses están detenidos y a la espera de su extradición a Estados Unidos por presunto tráfico internacional de drogas.
El JEDO dictó la medida hasta el 4 de noviembre del 2026 y el caso se tramita bajo el expediente 21-030208-0042-PE.
La audiencia de medidas cautelares se extendió por casi cuatro semanas, debido al número de imputados, quienes en conjunto contaban con 17 abogados defensores (públicos y particulares) y dos fiscales en representación del Ministerio Público.
Para ello, se reservaron dos salas y parte de los implicados escuchó las argumentaciones por pantalla de video.
Los presuntos integrantes del grupo fueron detenidos el 4 de noviembre durante 67 allanamientos en cinco provincias. De acuerdo con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), se trata del operativo más grande en su historia.
La base del grupo se encuentra en la provincia de Limón, pero también tenía dominio de la costa Pacífica. Desde Limón, sin embargo, coordinaba el envío de cocaína hacia Estados Unidos y otros destinos, utilizando los puertos del Caribe como principal punto logístico.
De acuerdo con el OIJ, la estructura reúne todos los elementos de un cartel transnacional: liderazgo definido, redes de distribución, control territorial, infraestructura logística y vínculos con redes criminales extranjeras.
