Un hombre de 37 años, que al parecer se metió ilegalmente a un lavacar en Zapote, fue amarrado a un carro y arrastrado por el predio. Además lo desnudaron, le cortaron el cabello y lo golpearon varias veces con un machete.
Por este asunto, este miércoles 12 de julio fue detenido un hombre de apellidos Jarquín Hiraldo, de 37 años, a quien el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) señala como el principal sospechoso de cometer los delitos de tortura, privación de libertad agravada y lesión con arma contundente.
Los hechos por los que se investiga ocurrieron el pasado 6 de julio, entre 1 a. m. y 2 a. m. en un lavacar que tiene al lado un predio para el estacionamiento de camiones. Según la pesquisa, la víctima fue sorprendida dentro de la propiedad y fue entonces cuando fue torturado. La Policía Judicial no reveló la identidad del ofendido ni su estado de salud, solo indicó que, en apariencia, es un indigente de la zona.
Jarquín, de origen nicaragüense, fue detenido por la Sección de Delitos Contra la Integridad Física del OIJ y luego puesto a las órdenes del Ministerio Público para que se determine su situación jurídica. Se desconoce si este hombre trabajaba en el lavacar o por qué estaba en el sitio.
En el sitio del allanamiento se hizo una inspección con el apoyo de personal de Biología Forense y un perro entrenado en la identificación de fluidos biológicos y se tomaron muestras de cabello que estaban en lugar y que podrían ser del ofendido, precisó Rándall Zúñiga, director a. i. de la Policía Judicial.
Además de la captura de Jarquín, también se identificó a otros hombres que estaban en el lavacar y serán investigaciones posteriores las que determinen si tuvieron relación con los hechos.
Según el Código Penal, purgará prisión de 3 a 10 años quien le ocasione a una persona dolores o sufrimientos físicos o mentales, la intimide o coaccione por un acto cometido o que se sospeche que ha cometido. La privación de libertad agravada se sanciona con cárcel de 2 a 10 años.