La mañana de este jueves inició el juicio contra un hombre de apellidos Castro Núñez, de 31 años, sospechoso de cometer siete violaciones en Sarapiquí, Heredia. Su caso se volvió mediático en marzo del 2021 pues logró evadirse de celdas del Organismo de Investigación Judicial en la comunidad y se mantuvo en fuga durante tres semanas.
Según confirmó la Fiscalía, en el Tribunal Penal de Sarapiquí se juzgan hechos que ocurrieron durante seis meses, entre julio del 2020 y enero del 2021, en La Victoria de Horquetas, en Sarapiquí.
De acuerdo con el artículo 156 del Código Penal, por cada uno de esos delitos el hombre se expone a penas entre los 10 y 16 años de cárcel, pues usó la violencia corporal e intimidación.
El sujeto es oriundo de Grecia, Alajuela, vecino de Horquetas, casado desde el pasado 15 de febrero y padre de una menor de dos años.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/gruponacion/BKYYEMGVRFDXZJZ2AHTCJ6L4A4.png)
El sujeto fue detenido el 1.° de marzo, se fugó el 7 de marzo, y unas tres semanas después lo recapturaron. Foto: Cortesía: OIJ.
De acuerdo con los informes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Castro escogía casas donde estaban las puertas y ventanas abiertas para ingresar, amenazar a sus víctimas con arma blanca y cometer los delitos sexuales.
Al parecer, el imputado inicialmente engañaba a las personas haciéndoles creer que tenía más armas y que otros cómplices actuaban con él, lo cual fue descartado por la Policía, pues siempre se condujo solo.
En las denuncias se indica que el hombre se quedaba en las casas por varias horas y, antes de irse, robaba artículos de valor, razón por la cual también se le acusará por robos agravados.
Una larga fuga
El sospechoso fue arrestado por agentes judiciales, cerca de su casa, el 1.° de marzo del 2021.
Casi una semana después, el 7 de marzo, Castro se fugó de una celda judicial luego de decirle a los policías que tenía un problema de salud y pedirles que lo dejaran usar una ducha ubicada dentro de las instalaciones, pero adyacente a las celdas. El sujeto aprovechó que la estructura era vieja para fugarse sin que los guardas lo advirtieran.
Posteriormente, el 26 de marzo, Castro fue capturado de nuevo en una casa en Cujubuquí de Horquetas, tras una intensa búsqueda que llegó a tener casi 150 policías, perros adiestrados y drones.
Decenas de oficiales de la Fuerza Pública y el OIJ llegaron hasta la vivienda donde, una vez que la rodearon, le ordenaron a Castro que saliera por su propia voluntad, pero no atendió a la orden.
Poco después, los policías escucharon a una persona dentro de la casa que pedía ayuda, por lo que ingresaron con los agentes del Servicio Especial de Respuesta Táctica (SERT) y procedieron con la detención. Al ingresar a la casa, los oficiales vieron al sujeto amenazando con arma blanca a una mujer.