David Ochy irá a prisión preventiva mientras se resuelve su extradición

El Juzgado Penal de Pococí no aceptó la prisión preventiva que solicitó el Ministerio Público en contra del excandidato presidencial panameño, David Ochy Diez, quien fue detenido el martes en Guápiles por su presunta participación en actividades de lavado de dinero en Costa Rica.

De acuerdo con el Juzgado, esta determinación se tomó porque la investigación evidenció una baja probabilidad delictiva; es decir, no demostró de manera suficiente que David Ochy y sus dos presuntas cómplices, quienes fueron detenidas también el martes, estuvieran involucradas en actividades de lavado de dinero en el país.

Sin embargo, Ochy tiene una orden de captura internacional por su supuesta implicación en el caso de blanqueo de capitales New Business en Panamá, por lo que el Tribunal Penal de San José le dictó dos meses de prisión preventiva. Esto con el objetivo de que enfrente el proceso de extradición.

Ochy, de 63 años, es investigado en su país natal por aparentemente utilizar fondos públicos del proyecto de extensión de la autopista Arraiján-La Chorrera, adjudicada a su empresa constructora Transcaribe Trading (TCT), para colaborar en la compra de la editorial Panamá América (Epasa). Esta adquisición fue realizada en el 2010 por el entonces presidente panameño, Ricardo Martinelli.

La investigación de caso se inició en el 2017 y como resultado, Martinelli y el hermano de Ochy, Daniel Ochy, quien también estuvo involucrado en el caso, fueron condenados a prisión en julio. El exmandatario purga una condena de 10 años y medio de prisión, mientras que el hermano de David recibió 8 años.

Las autoridades costarricenses lograron localizar al fugitivo extranjero gracias a sus movimientos sospechosos de dinero y la adquisición de bienes de alto valor, incluyendo dos tractores, dos automóviles y una camioneta pick-up.

Según informaron las autoridades judiciales, Ochy incluso poseía una empacadora de plátanos en Batán, supuestamente administrada por una sobrina.

El panameño residía en Costa Rica con una identidad costarricense falsa, así que inicialmente los investigadores creyeron que se trataba de un ciudadano tico. No obstante, tras el avance de la investigación, se determinó que se trataba del político panameño fugitivo.